Los reyes de España, Felipe y Letizia, finalizan hoy su visita a Suecia, país que se encuentra inmerso en plena crisis política, con Magdalena Andersson permaneciendo como primera ministra el tiempo récord de siete horas y media.
Por la mañana se convertía en la primera mujer en ocupar el cargo y por la tarde dimitía tras perder una votación sobre presupuestos y la salida de ‘los Verdes’ de la coalición gobernante.
En este contexto, y con agendas separadas este jueves, los reyes, que han disfrutado de un almuerzo en su honor ofrecido por la alcaldesa de Estocolmo, cierran su visita de Estado en la residencia de la embajadora española en el país.
En total, ha durado tres días, y allí muchas de las miradas han estado también pendientes de la reina Letizia, quien sorprendió con su modelo de una marca low cost en la cena de gala sueca, aunque sí es habitual que lo haga en otro tipo de eventos.
Pese a que el rojo parece ser su color fetiche, ayer quiso hacer un guiño a la moda de Suecia, como lo hizo al vestir el modelo de una diseñadora vasca en la inauguración del Memorial de las Víctimas del Terrorismo.
También cada verano da muestra de sus guiños a través de su indumentaria, calzando alpargatas en Mallorca.
Comprometida con el medioambiente, la hemos visto con una firma tarifeña que confecciona sus diseños con materiales ecológicos, si bien su mensaje más reivindicativo fue, seguramente, el que lanzó al lucir un vestido gris confeccionado por 12 víctimas de la trata de mujeres.
Hoy, Letizia vuelve a apostar por la moda española con un modelo rosa con motivos florales en relieve; una nueva adquisición como el vestido de la pasada noche, que también guarda en su armario la heredera de la corona sueca.