Beyoncé se encuentra inmersa en su gira mundial en la que está presentando su último disco, 'Renaissance', y sus antiguos éxitos reconocidos a nivel mundial como 'Crazy in Love'. Un espectáculo en mayúsculas en el que forma toda una fiesta en una pista de baile llena de lentejuelas, brillo y color y en la que está acompañada de un inmenso equipo de baile.
Equipo de baile en el que su propia hija, Blue Ivy, de 11 años hace una pequeña aparición en mitad del 'show'. Como no podría ser de otra manera, para esta gira Beyoncé ha vuelto a contar con la ayuda de Les Twins, dos hermanos gemelos que son bailarines y que llevan formando parte del equipo de baile de la artista desde 2011.
Su carisma, creatividad, exigencia y profesionalidad en cada paso que dan, han hecho que Beyoncé no quiera despegarse de ellos y cuenta con estos dos hermanos para cada actuación o gira que protagoniza.
Entre sus fans son más que conocidos. Debido a su peinado afro y la conexión que tienen sobre el escenario, Les Twins han conseguido hacerse un nombre propio en la industria del baile. Además de su excelente trayectoria, Beyoncé y Les Twins comparten una amistad que es más que palpable cuando actúan juntos sobre el escenario.
Un claro ejemplo ha ocurrido en el último concierto que la intérprete ha dado en Hamburgo. Justo cuando estaba cantando su éxito 'Break My Soul', el vestido rosa fucsia repleto de lentejuelas que llevaba casi le juega una mala pasada a la diva de la música. Sin percatarse ni ella misma, la apertura del escote empezó a moverse mientras dejaba ver parte de su pecho.
Rápido y veloz, uno de los hermanos gemelos que justo se encontraban cerca de Beyoncé improvisó en mitad del escenario. El bailarín se colocó frente a la cantante y, con tan solo un giro, recolocó el escote de su vestido tapando de nuevo su pecho.
Completamente atónita pero sin dejar de cantar, afinar y actuar, Beyoncé siguió con el espectáculo. Si no fuese por los fans que se encontraban en primera fila y que estaban grabando el show, el momento hubiese pasado inadvertido.
Sin embargo, los miles de objetivos que apuntaban a Beyoncé consiguieron captar este momento que se produjo en solo unas milésimas de segundo.