Arturo desprende energía, vitalidad y pasión por la música con cada palabra que sale de su boca. El que un día vendiera cupones de depilación láser de día y por la noche pusiera copas en bar del centro de Barcelona, ahora ve su sueño hecho realidad con el estreno de su primer EP, ‘Melancoliz’.

El trabajo cuenta con seis canciones (‘Extraño’, ‘Bailando y bebiendo’, ‘Vinos en Marbella’, ‘Explícame’, ‘San Juan’ y ‘Colores tristes’) en las que, según sus propias palabras, canta al desamor desde un punto de vista melancólico y también feliz. Pero no feliz porque se haya terminado, sino por el recuerdo que esa persona dejó en su vida.

Ahora, hablamos con él en primicia de música y también aprovechamos la oportunidad para conocerlo mejor. ¿Cómo es ese Almácor que se queda en casa y no está sobre un escenario? ¿Con qué sueña? Las respuestas, a continuación:

-¿Contento con la acogida de ‘Melancoliz’?

Estoy contento porque es un proyecto que tenía muchas ganas de sacar después de tanto tiempo trabajando en él.

Ha sido la polla el proceso, me lo he pasado muy bien. Poder juntar seis temas más serios, seis temas en los que he buscado mi esencia, me ha dado la oportunidad de encontrarme como artista.

-¿Qué es lo que hace tan especial este EP?

Lo especial es que se hizo en un momento de mi vida en el que necesitaba expresar ese sentimiento. Habla de la melancolía y también la felicidad: recordar una relación que mantuve a lo largo de mi vida, que ya no seguimos juntos, pero no por eso tengo que recordarla con tristeza.

Lo hice todo en Canarias y tiene una vibra muy especial. Creo que la gente nota esa energía.

-¿Crees que, por fin, hemos derribado los prejuicios que siempre han girado en torno a la música urbana y el reggaetón en concreto?

Sí, al 100%. El lenguaje más duro, de calle y obsceno ya pasó hace mucho tiempo. El reggaetón de ahora es un género súper amplio, se ha pasado página y cada vez se ‘poperiza’ más. El urbano cada vez es más comercial y eso permite ver a artistas como Justin Bieber colaborando con Luis Fonsi o Drake con Bad Bunny.

-La música siempre fue tu plan A, ¿y no hay plan B por si, de repente, diera un volantazo y no fuera tan bien como uno espera?

La verdad es que no tengo plan B. El plan A es al que doy prioridad. Voy con todo.

-¿Qué sentimiento produce que antes trabajaras en la calle vendiendo cupones de depilación láser y ahora haya gente pendiente de tus publicaciones y conciertos?

¡La polla! Es muy fuerte… Y eso que todavía no estoy donde realmente quiero estar. Me falta mucho por recorrer, pero echando la vista atrás es increíble lo mucho que ha cambiado mi vida. Antes tenía dos trabajos para poder mantenerme, en la depilación láser y poniendo copas en un bar. Haber vivido ese gran cambio me hace valorar realmente dónde estoy y lo que he conseguido y también controlar la ansiedad de necesitar que todo llegue cuanto antes.  

-Además, eres defensor del trabajo en equipo pues en varias entrevistas has puesto en valía la labor de tus compañeros productores y compositores

Por supuesto. Somos un equipo. Si Messi juega solo, pierde el partido, pues con los artistas pasa lo mismo. Los productores y los compositores son parte esencial de la industria y muchas veces les falta crédito.

-¿Has aprendido a lidiar con una industria tan complicada como la musical a base de estafas y desengaños o dirías que has sido un chico con suerte?

De todo, bro. De todo. En esta industria te encuentras gente de corazón y también vampiros.

-¿Suerte o trabajo constante?

Trabajo, no hay duda. Aunque siempre hay que contar con un poco de suerte, creo que cuanto más se trabaja más se llama a la suerte.

-¿Qué hay del Arturo cuando se quita la chaqueta de artista? ¿Cómo se define a sí mismo?

Soy un chaval normal. Me encanta estar partiéndome la polla con los míos y no me gusta nada los mareos. Quiero estar en casa con mi familia, mi novia… Conozco a mucha gente, pero amigos súper cercanos tengo pocos. Prefiero echarme una Play a irme de fiesta.

-¿Qué metas profesionales te has fijado?

Ojalá marcarme un Bizarrap pronto. Sería uno de mis sueños realmente y espero que se cumpla.

Seguiré regalando música con los pies en la tierra y llamando a puertas para hacer colaboraciones de gente que aporte números, pero también haya una conexión especial.