A medida que se acerca la primavera es frecuente que nos topemos con más y más ciclistas en las carreteras. En esta época, muchos aficionados y conductores quieren llevar una tabla de surf o una bicicleta en el coche para aprovechar las escapadas a un entorno rural, con espacio de sobra para pedalear y disfrutar de la libertad que da desplazarse en terreno abierto.
De la misma forma, también es habitual que surjan algunas dudas sobre cómo transportarla correctamente, qué tipo de anclajes se deben utilizar y qué normas debemos seguir para no enfrentarnos a sanciones de la DGT, que pueden oscilar entre los 80 y los 200 euros.
Para saber cuál es la mejor manera de transportar la bicicleta en el coche, conviene atender al artículo 14 del reglamento de circulación. En él se especifica que es obligatorio asegurar la carga del vehículo de manera que no pueda caer, desplazarse, derramarse o desprenderse. El reglamento señala además que la carga de objetos transportados en el vehículo deberá ser adecuada y estar debidamente asegurada, de modo que no pueda producir interferencias con el conductor, afectar a su libertad de movimientos o disminuir su campo de visión.
Una vez nos sabemos la teoría, toca pensar en nuestro propio coche y en el espacio disponible para llevar tanto la bicicleta como cualquier otra carga de cierto volumen. ¿Contamos con suficiente espacio? ¿El maletero y la parte correspondiente a los asientos traseros es demasiado ajustada? ¿La bici tapa la matrícula o alguno de los pilotos?
Hay varias opciones:
Desmontar la bicicleta para acomodar individualmente las piezas en el maletero, colocándolas de manera que no se muevan ni golpeen durante la conducción. Si no tenemos cierta experiencia en esta tarea, suele ser engorroso al principio. Nada que un poco de práctica no arregle. Lo más recomendable es quitar alguna de las ruedas, o las dos, para reducir el espacio que ocupa la bici y poder acomodarla. Después, con abatir los asientos y asegurarla con cinchas y sujeciones a algún punto de anclaje, será suficiente para cumplir la normativa y evitar las sanciones. Recordemos que un objeto de cierto volumen suelto dentro del habitáculo del coche representa un serio peligro en caso de accidente. Es importante asegurarse de que la bicicleta desmontada no baila ni se desplaza libremente mientras conducimos.
Otro de los consejos de la DGT es usar un portabicicletas homologado, diseñado específicamente para anclar la bicicleta de forma segura a la estructura del vehículo. Aquí hay que tener en cuenta que la matrícula siempre ha de verse claramente y que tendremos que llevar la señal V-20, para señalizar la carga. Si tapamos la matrícula o alguno de los pilotos, habrá que complementarlo con placas y luces adicionales.
Los hay de varios tipos: