Venus ha sido visible a simple vista buena parte del tiempo que hemos estado confinados. Un regalo, cuando la Luna no le ha robado todo el protagonismo, que ha amenizado las noches a muchos aficionados a la astronomía. En los próximos días irá estando cada vez más cerca del horizonte, perdiéndose en el brillo del crepúsculo mientras otro planeta empieza a colocarse en lo alto: Mercurio.
Venus desciende y Mercurio, asciende. Por el camino se encontrarán, lo cual sucederá la noche del jueves 21, con que si no tienes planes, es una oportunidad de oro para observar la conjunción de ambos planetas. Lo harán a partir de las 19:00 horas de la tarde, por lo que hay que estar atentos desde las 21:20 horas, cuando empieza a amanecer en zonas de España.
La Luna pondrá de su parte para facilitar la vista de ambos, puesto que el día 22 entrará en fase de luna nueva, y por tanto será prácticamente imperceptible.
No se alejarán demasiado del horizonte, que estará despejado, por ello lo único que necesitamos para no perdérnoslo es asegurarnos de que ningún objeto –como un árbol–, obstaculiza el campo de visión.
Brillará más Mercurio, más cercano al Sol, aunque El mayor tamaño de Venus hará que la diferencia apenas se aprecie a menos que preparemos el telescopio.
De igual manera, al amanecer, el Real Observatorio de Madrid ha informado de que podremos disfrutar esta semana en Júpiter y Saturno a la derecha de la Luna, más altos en el firmamento que Venus y Mercurio. Aunque en este caso será un privilegio solo apto para madrugadores, puesto que a partir de las 7 horas el sol acapara todo el protagonismo.