Starlink, la red de satélites de Elon Musk para ofrecer conexión a internet en cualquier parte del mundo, ya es una realidad. El servicio ya está oficialmente disponible en España, aunque recibir le kit inicial desde Estados Unidos requiere de una espera de unas semanas, y además los pedidos se atienden "por orden de llegada".
Starlink ofrece acceso a su servicio de Internet basado en una su red de 1.700 satélites interconectados en una órbita baja. El servicio asegura acceso a videollamadas, juegos online, transmisión de vídeo a alta velocidad, actividades que históricamente no habían sido posibles con Internet por satélite. Durante la versión beta, los usuarios del servicio pueden obtener velocidades entre los 100 Mbps y 200 Mbps y una latencia de 20ms en la mayoría de los lugares.
Este nuevo servicio está sobre todo enfocado a las zonas rurales, donde la conexión a Internet mediante fibra o cable no llega o es insuficiente.
Starlink requiere de un kit de instalación (un terminal de usuario, un router WiFi y una antena con la que poder conectarse a la red de satélites). Todos los equipos y su instalación completa tienen un coste de 499 euros. Después, el servicio tiene una suscripción mensual de 99 euros (a lo que hay que añadir la 'tarifa reguladora' de 9 euros al mes). Recibir el kit desde Estados Unidos tiene un coste de 60 euros en gastos de envío.
Según asegura en su página web, configurar la conexión a Starlink es muy sencillo, aunque la instalación de la antena requiere un lugar que le asegure una vista despejada del cielo. El servicio cuenta con una aplicación para móviles gratuita que te indica el mejor lugar para instalarla y cómo hacerlo.
Starlink puede ser una solución ideal para comunidades rurales, con un complicado acceso a las redes de Internet de alta velocidad por otros medios. Del mismo modo, puede ser una buena solución para escuelas rurales o aisladas o para tener fácil conexión a internet durante o después de sufrir desastres naturales que hayan cortado las comunicaciones terrestres convencionales.
Mientras la mayoría de los servicios de Internet por satélite provienen de satélites geoestacionarios únicos que orbitan el planeta a unos 35.000 km de altura, Starlink es una constelación de 1.700 pequeños satélites que orbitan el planeta mucho más cerca de la Tierra, a unos 550 km, y cubren todo el planeta.
Debido a que los satélites Starlink están en una órbita baja, el tiempo de datos de ida y vuelta entre el usuario y el satélite, también conocido como latencia, es mucho menor que con los satélites en órbita geoestacionaria. Esto permite a Starlink ofrecer servicios que requieren mucha velocidad y baja latencia como el juego online, que normalmente no son posibles en otros sistemas de banda ancha por satélite.