Gracias al mapa de isobaras podremos saber si tenemos sobre nuestras cabezas un anticiclón o una borrasca
Las isobaras se usan en los mapas meteorológicos y unen los puntos de lugares de la superficie terrestre que tienen la misma media de presión atmosférica
Las vemos todos los días en los mapas del tiempo: las isobaras se utilizan para separar distintas áreas de presión atmosférica y nos permiten comprender mejor los cambios climáticos y asociarlos a la zona concreta en la que se van produciendo. ¿Qué son las isobaras? ¿Cómo leer los mapas de isobaras?
¿Qué son las isobaras y cómo se leen los mapas de isobaras?
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Una isobara (del griego, ‘iso’ -“igual”- y ‘bara’ -“presión”- es una línea que representa la presión, es decir, una curva de igual o constante presión en un gráfico, trazado o mapa. La usamos para leer los mapas del tiempo y nos brindan información acerca de la fuerza del viento y su dirección en una zona determinada, entre otras muchas cosas. Se suelen referir únicamente a líneas que unen en un mapa los puntos de igual presión atmosférica, que se miden en ‘bares’.
Desde un punto de vista más técnico, las isóbaras suelen medirse en intervalos de 4 milibares, considerando que 1013 milibares o hectopascales representan una presión normal, mientras que presiones mayores o menores se consideran altas o bajas. Así, podemos extraer tres conceptos:
- Alobara es una curva que delimita un área de cambio de presión atmosférica.
- Analobara es el nombre que recibe esta curva cuando el cambio es positivo
- Catalobara es el nombre que recibe esta curva cuando el cambio es negativo.
Básicamente, gracias a estas líneas dibujadas en un mapa de isobaras podremos saber si tenemos sobre nuestras cabezas un anticiclón, una borrasca... que se corresponden con altas o bajas presiones respectivamente. El anticiclón se asocia así con buen tiempo, mientras que las presiones bajas indican lo contrario. Por eso las líneas que lo dibujan se presentan en color rojo (presión alta, buen tiempo y calor) o azul (presión baja, mal tiempo y frío).
Además, las isobaras suelen ser concéntricas y dibujar 'valles’ de presión en el caso de las borrascas o 'crestas' en el caso de los anticiclones. En el primer caso, lo habitual es que ello sea presagio de lluvias; en el segundo, de cielos despejados. Así, cuando en un anticiclón vemos distintas líneas muy separadas entre sí, ello es sinónimo de una gran calma y un tiempo estable y agradable. Al contrario, al ver muchas lineas juntas en una zona de borrasca, ello nos indica claramente que el tiempo es turbulento, al haber cambios de presión muy cercanos entre una zona y otra. Por otro lado, cuando más en el centro de la borrasca nos encontremos, peor será el tiempo y mayor será la posibilidad viento y lluvias (más baja será la presión).