Una foca ‘cachorro’ se ha ganado con sus divertidas travesuras el corazón de los londinenses desde su rescate en febrero. El animal parecía haberse asentado con facilidad en el Támesis, el río que atraviesa la capital británica. Pero un ataque reciente a ‘Freddie Mercury’, como fue apodada, ha provocado su muerte, un hecho evitable que está causando conmoción en la ciudad. Esto es lo que ha pasado.
Freddie ya era una especie de icono de Londres. Fue rescatada de Teddington Lock después de que un señuelo de pesca quedase atrapado en su boca, contaba ‘The Guardian’, y trasladada a un lugar más seguro en la isla de Sheppey. Pero la foca, de tan sólo 10 meses de edad, no tardó en regresar al río que atraviesa la capital inglesa, donde pasaba los días cómodamente hasta el pasado domingo.
La joven foca descansaba en la orilla cuando fue atacada por un perro. Cuatro personas se lanzaron entonces a ayudarla, abriendo las mandíbulas del animal para liberar a ‘Freddie’, que tuvo que ser llevada urgentemente a un hospital de vida silvestre de South Essex.
Varios expertos del hospital, junto con los voluntarios del British Diver Marine Life Rescue (BDMLR) se pusieron entonces en lo peor. “La aleta de Freddie está fracturada y la articulación dislocada. Las focas no toman bien la anestesia, ya que tienen un reflejo de inmersión y no respiran. Aunque se podría intentar clavar la fractura, sería imposible inmovilizar la extremidad para darle tiempo a que sane. Más desafiante es la dislocación que no se puede reparar”, han informado a través de su cuenta de Facebook.
Y eso no era lo peor. Freddie sufría una infección bastante grave a causa de la mordida del perro que estaba provocando hinchazón en la aleta y se extendía rápidamente por otras zonas de su cuerpo. Todo cuanto podían hacer los veterinarios era darle antibióticos para aliviar el dolor.
“Creemos que la única opción ética y justa que tenemos es poner fin a su sufrimiento”, comunicaban desde el hospital de South Essex.
Después del trágico suceso, tanto este centro como la asociación de rescate BDMLR (por sus siglas), han recibido incontables donaciones para seguir desarrollando su labor. “Lamentablemente, Freddie no es la única foca que hemos tenido que cuidar por un ataque. Por favor, no se acerquen a las focas y siempre, siempre, mantengan a los perros con correa y bajo control”, han dicho.
La llamada de atención tras el fallecimiento de la foca Freddie está muy presente en los medios británicos esta semana. El Estudio de Mamíferos Marinos del Támesis de la Sociedad Zoológica de Londres ha informado hasta ahora de 117 avistamientos de focas a lo largo del río Támesis este año, informó Evening Standard, una cifra que puede aumentar si la ciudadanía pone de su parte.