Quizá solo a unos pocos les suene el nombre de la compañía Nvidia, pero esta empresa estadounidense está revolucionando el mundo tecnológico. Su trabajo con la inteligencia artificial marca tendencia, pero no es una labor cualquiera. Son los encargados de la tecnología que sustentan los productos de IA, así como el gran despliegue de herramientas como ChatGPT.
Sin el trabajo de Nvidia Corporation, los sistemas de IA de los que habla todo el mundo ahora no serían posibles. Eso ha llevado a la empresa californiana de software y fabless a obtener mayores ganancias con la inteligencia artificial que Microsoft, Google o Meta, los cuales se enfrentan en una tremenda carrera corporativa por liderar el mercado -que puede superar los 165.000 millones de valor-. Hay cierta tensión, según recogen medios como 'Investors'.
Nvidia, con sede en la ciudad de Santa Clara, se está convirtiendo en un auténtico referente. Sus empleados se encargan de diseñar la mayoría de semiconductores que funcionan como eje -o 'cerebro'- de los sistemas de inteligencia artificial.
Sus tarjetas gráficas, con las que ha ganado fama la compañía a lo largo de numerosos años, son la clave del entrenamiento de modelos de lenguaje como el que utiliza ChatGPT, entre otros: sin ellas, acarrearía mayores gastos y sería más lento.
Nvidia no tiene competencia en el desarrollo de chips para el entrenamiento del aprendizaje automático y profundo de la inteligencia artificial (tiene alrededor del 95% del mercado de GPU). Actualmente, son los líderes a nivel mundial en hardware y software de IA, la base sobre la que parten las ambiciones de las compañías tecnológicas.
Resultado de estos benefiicios es la subida en bolsa de la empresa este jueves (por encima del 25%). Registraron ganancias de 190.000 mllones de dólares en las horas que duró la sesión bursátil, la segunda mayor revalorización por una compañía de EEUU en un día.
El valor de mercado de Nvidia es de unos 945.000 millones de dólares. Hablamos de la quinta empresa más valiosa de Estados Unidos y la sexta en escala mundial. Ya se puede decir que es un gigante tecnológico. La mejoría en los beneficios se ha ido registrando a lo largo de los últimos meses, especialmente en los informes del trimestre que finalizó en abril.
Si supera los 1.000 millones de dólares de valor, podrán decir que ya 'se sientan en la mesa' de Alphabet (Google), Amazon, Apple, Microsoft y Saudí Aramco. Ese selecto grupo que consiguen alcanzar una capitalización de un "trillón" de dólares (en escala numérica corta, la usada en EEUU, que equivale a nuestro billón). Por ahora, están por delante en el desarrollo de los chips que son clave para los sistemas tanto impacto están causando en el mundo.