Una de las primeras ideas que nos vienen a la cabeza cuando Internet empieza a fallar es si nuestros vecinos nos estarán robando el WiFi y lo cierto es que este es un motivo posible por el que tu conexión podría ir más lenta de lo normal, aunque no el único. En cualquier caso, siempre viene bien controlar quién accede a nuestra red Wifi y saber de qué forma debemos proceder para conocer los dispositivos conectados a ella, así como para denegar accesos si así lo deseamos. ¿Cómo saber si tu vecino te roba WiFi? ¿Cómo evitar que lo siga haciendo?
Aunque existen múltiples motivos por los que tu conexión a Internet puede ir lenta, uno de ellos (y, a veces, el que primero nos viene a la cabeza) es la posibilidad de que un vecino esté 'robándote' tu conexión WiFi. Por eso es importante saber cómo controlar el acceso a dispositivos a tu router.
Para hacerlo, lo más sencillo es recurrir a alguna aplicación gratuita, si bien, tal y como explican desde Roams, estas herramientas solo detectan a los ladrones de Wifi cuando están haciendo uso de ella. Existe una amplia variedad, y algunos nombres conocidos son 'Angry IP Scanner' o 'Wireshark', así como 'Who is on my Wifi', una aplicación que se ejecuta en segundo plano y muestra quién se conecta y durante qué tiempo.
También existen apps rastreadoras de ladrones de WiFi para móviles: en Android, puedes descargar 'Net Scan' y 'Fing'; en el caso de iOS, las más conocidas son 'iNet' e 'IP Network Scanner'.
En caso de que tengas ciertos conocimientos en informática, puedes acceder a tu router. Para hacerlo, deberás entrar en la dirección genérica 192.168.1.1. Si esta dirección no funciona, consulta tu propio router: en su información (normalmente en la parte inferior) aparecerá la dirección a la que debes entrar para configurarlo. Ya solo faltará introducir tu usuario y contraseña (consulta a tu operador si no conoces estos datoa) y buscar las opciones para DHCP dentro del panel de control del router. De esta forma, podrás ver las direcciones IP y MAC asociadas a cada dispositivo conectado.
Es en este punto en el que tienes que identificar posibles IP o Host Name que no pertenezcan a tu familia. Si es el caso, has dado con un ladrón de WiFi. La opción más sencilla para expulsarle es cambiar las contraseñas de tu red, reiniciciando el router a continuación.
También puedes configurar qué direcciones MAC pueden acceder a tu WiFi, algo que puede resultar engorroso si tienes invitados y quieres prestarles tu conexión (te obligará a dar permiso a cada nuevo dispositivo entrando de nuevo en la configuración de tu router). Además, puedes excluir por defecto todas las conexiones excepto las manuales, que podrás configurar desde el router. Un gesto tan sencillo como apagar el router mientras estás de vacaciones también evitará intrusos en tu ausencia.
Si finalmente llegas a la conclusión de que nadie está robándote conexión, tal vez te interese seguir estos consejos para acelerar Internet en tu hogar.