Dos crías de cocodrilo de una especie en peligro de extinción llegaron al mundo hace tres meses en el zoo de Lima. Desde entonces, los responsables del parque no les quitan ojo y se aseguran de que todo vaya bien. Su nacimiento es el resultado exitoso de un experimento de reproducción mediante inseminación artificial.
Sólo dos de los 24 huevos que se incubaron durante 90 días lograron sobrevivir. Los recién nacidos ya tienen tres meses aunque habrá que esperar aún para saber el sexo de ambos.
“¡Nuevos miembros en nuestra familia!”, celebró a través de su cuenta de Facebook el zoológico de Huachipa. "Encontramos los huevos en la arena de su ambiente, los recogimos y estuvieron bajo una temperatura especial durante unos 90 días, al cabo de los cuales nacieron tres crías, pero solo dos sobrevivieron", explicó el cuidador de los recién nacidos, José Flores, a EFE.
Se trata de un experimento exitoso ya que se trata de una especie en peligro de extinción cuyo hábitat natural está siendo destruido por los trabajadores agrícolas, complicando la conservación de la especie. Otra amenaza que está mermando sus poblaciones es la captura clandestina para su comercio o el de su piel.
Su especie, cuyo nombre científico es Crocodylus acutus (también conocida como Tumbes, cocodrilo americano o lagarto leal, puede medir desde 3,5 metros hasta más de 7, y lo caracterizan su alargado hocico y su gruesa cola. Es uno de los cocodrilos más agresivos.
La UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) lo incluye en la lista de animales vulnerables en México, y se encuentra asimismo protegido en Estados Unidos, donde se extiende desde Florida hasta algunas islas caribeñas.