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Acaba de terminar la segunda ola de calor del verano con temperaturas de récord. En estos días es importante hidratarse para evitar los llamados golpes de calor. Uno de los sectores donde más se sufren las altas temperaturas es en el campo. Por eso, la Universidad de Lleida ha colocado una pulsera a los temporeros que mide en cada momento los niveles de hidratación, tal y como informan en el vídeo Silvia Asiain, Paula García y Pau Morey.
Al atuendo habitual de los temporeros que soportan las temperaturas extremas se añade ahora este dispositivo en su brazo que mide en tiempo real los niveles de hidratación, una información fundamental para evitar golpes de calor.
El sensor de hidratación de las pulseras, desarrollado por la empresa hDrop Technologies Inc, mide la sudoración que han tenido, cuántos litros de agua han podido perder y cuanto cantidad de sodio y cloro han podido perder, tal y como explica a Informativos Telecinco Tania Cameli, investigadora de la Universidad de Lleida.
Aunque los temporeros explican que siempre van acompañados de agua durante sus jornadas de trabajo, es importante saber si la ingesta es la adecuada. "No sabemos si bebemos lo que realmente tenemos que beber y no todos tenemos la misma sensación de sed", apunta Judith Roca, otra investigadora de la Universidad de Lleida.
Y es que los datos de la pulsera muestran diferencias entre unos empleados y otros, aunque trabajen a la misma temperatura. Las cifras se analizan y cuando termina la jornada laboral se chequea el estado de salud de cada trabajador.
Si se aprecia un déficit, los investigadores dan pautas de hidratación. Aunque los investigadores han comenzado a probar la pulsera en el campo, se va a probar también en ancianos y niños con el objetivo de evitar los golpes de calor.
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