El uso incontrolado de los teléfonos móviles y otros dispositivos genera una serie de problemas en el desarrollo de niños y adolescentes. Por eso, muchos padres quieren tener cierto control sobre el uso que hacen sus hijos en Internet. El objetivo es que los padres puedan dirigir a sus hijos y orientarles en el uso de los numerosos dispositivos electrónicos que les permite navegar por todas partes con el fin de evitar que caigan en los principales malos usos, como el sexting, grooming, cyberbulling o múltiples estafas.

Ante estos peligros, el Ministerio de Transición Digital ha anunciado que restringirá el acceso al contenido pornográfico a los mayores de edad a través de un sistema de verificación. Esta aplicación se denomina ‘Cartera Digital Beta’ y estará disponible a partir de verano. Esta nueva medida ha sido creada bajo el marco de la ley orgánica para la protección de los menores en el entorno digitales para facilitar el control parental.

De la misma manera, existen numerosas herramientas que limitan el uso que hace el menor de los móviles. Estas aplicaciones de control parental utilizan bloqueos, filtros o restricciones, además de otras medidas que permiten saber en todo momento en qué página está navegando su hijo o hija y qué hace en cada una de ellas.

Las ventajas que tienen estas aplicaciones son: fijar el horario de uso de móvil para que no sea utilizado en momentos indebidos como por la noche o en el colegio; restringir el uso de ciertas aplicaciones; bloquear el uso de ciertas aplicaciones y pantalla; localización en tiempo real y establecer alertas cuando el menor salga de un área determinada; filtrar contenido web para que ciertas páginas web queden bloqueadas y disponer de informes que ofrezcan resúmenes diarios que faciliten poner límites.

En primer lugar, Family Link es una aplicación de control parental que se adapta a las necesidades de cada familia con el objetivo de conseguir unos hábitos y usos digitales saludables. Es gratuita y permite su instalación en dispositivos Android y iOS en niños y adolescentes, aunque en estos últimos móviles solo se supervisará de manera parcial. Para utilizar esta aplicación se debe crear una cuenta en Google para el niño y vincular ambas cuentas y configurar las diversas restricciones que se deseen.

Esta aplicación permite establecer restricciones de tiempo de pantalla y programar horarios de sueño para garantizar que los menores no interrumpen sus horarios nocturnos por usar los móviles. Los padres también pueden utilizar los filtros que ofrece Google para evitar descargas de aplicaciones o contenido inapropiado de diferentes webs. Así mismo, recibirán un informe de actividad en el que se les mostrará las aplicaciones más usadas por sus hijos y cuándo tiempo han estado en ellas. Otra de las ventajas que tiene Google es localizar el dispositivo de los niños y hacerlo sonar, ver la batería que tienen o, incluso, bloquearlos.

Qustodio, es otra de las aplicaciones más famosas y utilizadas por los padres, especialmente su versión ‘Complete’ que es algo más cara que su versión normal. Por 42,95 euros al año, el plan ‘Basic’ incluye el bloqueo de juegos y aplicaciones, un límite de uso diario del dispositivo móvil, el filtrado web, la geolocalización y la función de poder pausar el contenido que están consumiendo los niños en Internet. En cambio, la función premium, permite establecer, además de todo lo anterior, rutinas y alertas personalizadas, realizar un seguimiento de las llamadas y los mensajes que reciban los menores y permite añadir un número limitado de dispositivos.

Esta aplicación se puede instalar en Android, Windows, iOS, Mac y Kindle. Acepta una gran variedad de métodos de pago, incluyendo: Visa; Mastercard, American Express, Google Pay, Apple Pay y Paypal. Ofrecen una garantía d devolución del dinero durante 30 días si no se está satisfecho con los servicios de la app. Para comenzar a utilizarla, tan solo hay que crear una cuenta en el dispositivo de los padres e instalar Qustodio en el teléfono de los hijos. Una vez hechos los primeros pasos, las cuentas se vinculan, habiendo aceptado los permisos previamente para poder disfrutar de todas estas herramientas.

Apple Screen Time también es una aplicación de control parental de instalación gratuita que está integrada en el sistema operativo iOS, la cual se puede configurar a través de los propios ajustes del sistema. Admite hasta 6 miembros, cada uno pudiendo tener hasta diez dispositivos, es decir, un total de 60. Tan solo los menores de 13 años pueden ser supervisados y deben formar parte del propio grupo familiar. Esta aplicación la usa los propios dispositivos de Apple cuando ofrecer un informe del tiempo de uso semanal del móvil. Ajustado al control parental, permite activar el tiempo de pantalla creando una opción que se llama ‘Compartir en familia’ para configurar el dispositivo del menor desde el teléfono móvil del padre. Podrán crear un código para cambiar la propia herramienta antes mencionada y entender el tiempo que vencen los límites de las aplicaciones, así como los contenidos y privacidad en el móvil del niño.

De la misma manera, con la opción ‘Tiempo desactivado’ solo estarán disponibles las llamadas telefónicas y las aplicaciones elegidas. También se pueden establecer límites diarios para distintas categorías de apps. La aplicación permite decidir a los padres con quién podrá comunicarse su hijo durante el día y el tiempo de inactividad. Estos límites se aplicarán a los contactos de iCloud, FaceTime, Mensajes y Teléfonos, pero no dentro de las diferentes aplicaciones de mensajería o redes sociales. 

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