La lluvia de estrellas Gemínidas está a punto de alcanzar su máxima actividad. Estos meteoros que brillan durante unos segundos por la noche proceden en realidad del asteroide Faetón, y son famosos por ser muy numerosos siempre a mediados de diciembre, cuando se estrellan contra la Tierra y nos regalan un espectáculo único. Te contamos cómo y cuándo verlo.
Las Gemínidas tienen una tasa de actividad por encima de los 120 meteoros por hora, lo que las convierte en una de las lluvias más activas del año junto a las Cuadrántidas de enero y las Perseidas de agosto, también llamadas “lágrimas de San Lorenzo”.
Las Gemínidas cruzan el cielo a una velocidad de 35 kilómetros por segundo durante varios días, durante los cuales se dejan ver en todo el hemisferio norte. Este año, su momento de máxima actividad tendrá lugar en las noches del 14 al 15 de diciembre, cuando podremos observar hasta 150 estrellas fugaces por hora.
Para observadores a nuestras latitudes, 40º norte, el radiante de las Gemínidas se sitúa por encima del horizonte desde una hora después del anochecer hasta el amanecer. El “radiante” es el punto del cielo en el que parece originarse la lluvia de meteoros, que en este caso es la constelación de Géminis, de ahí su nombre.
El 2022 no será un buen año para la observación de las Gemínidas, puesto que su momento de máxima actividad se producirá un día antes de que la Luna alcance su fase de cuarto menguante, informan desde el Observatorio Astronómico Nacional.
El origen de las Gemínidas fue un misterio durante siglos pues no se sabía asociar la lluvia de meteoros con ningún cometa periódico conocido. Hasta que, en el año 1983, el telescopio espacial de infrarrojos IRAS (lanzado por la NASA) identificó un asteroide, llamado Faetón, y al estudiar su órbita, se concluyó que era este asteroide el que causaba la lluvia de estrellas.
Faetón orbita alrededor del Sol cada 1,4 años, y cada año la Tierra pasa a través de su rastro de escombros, lo que da como resultado la Lluvia de las Gemínidas.
Faetón es el primer asteroide asociado con una lluvia de meteoritos, pero los astrónomos debaten sobre su clasificación y orígenes exactos. Faetón carece de un caparazón helado (la característica principal de un cometa), pero algunos lo consideran un "cometa muerto", lo que sugiere que una vez tuvo un caparazón helado que se derritió, explican desde la NASA.
Otros astrónomos lo llaman un "cometa de roca" porque Faetón pasa muy cerca del Sol durante su órbita, lo que teóricamente resulta en calentamiento y agrietamiento que crea escombros y polvo.
La conclusión es que los orígenes exactos de Faetón siguen siendo un misterio, pero sabemos que es el cuerpo padre de las Gemínidas.
El lugar de observación puede ser cualquiera con tal de que proporcione un cielo oscuro y con pocos obstáculos para la vista (como edificios, árboles o montañas). Por tanto, cuanto más te alejes de las luces de las ciudades, mejor.
Aunque pueden verse en cualquier parte del cielo, conviene dirigir la mirada hacia las zonas más oscuras, en la dirección opuesta a la posición de la Luna.
Lo más cómodo es tumbarse y esperar a que la vista se acostumbre a la oscuridad, lo cual tarde unos 30 minutos.