Encontrar un anuncio de un piso de alquiler se ha convertido en una auténtica odisea en Barcelona, donde la alta demanda ha llevado a la mayoría de portales inmobiliarios a dejar de publicitarlos para trabajar directamente con listas internas de candidatos.

"Llevamos meses que si es un alquiler por debajo de 1.200 euros no los llegamos a publicar. En nuestra base de datos tenemos una lista con gente que está interesada en alquilar una vivienda en Barcelona", explica Eva López, directora de Fincas Eva a 'Informativos Telecinco' sobre un mercado del alquiler que está en "un momento bastante dramático".

La gran demanda ha hecho que los anuncios desaparezcan de las inmobiliarias, que no necesitan publicitar los pisos en alquiler para encontrar inquilino. "Cuando tenemos la propiedad, directamente se envía un mensaje a los posibles clientes que puedan estar interesados. Ellos nos llaman, les enseñamos la vivienda y normalmente nos dura 24-48 horas", añade Eva López.

"Hay veces que nos dicen que dejan la reserva, pero primero hay que enseñar la vivienda y que estén de acuerdo con todo lo que hay en ella. A partir de ahí, miramos la documentación que nos puedan aportar para ver el perfil del cliente y luego el propietario es el que decide cómo alquilarlo y a quién", destacan desde Fincas Eva.

Una gran competencia para adquirir un piso en alquiler en la capital catalana, donde el mercado está "totalmente descompensado" desde verano del año pasado: "La cartera de pisos en alquiler cada vez está menguando más, con lo cual se agranda la bolsa de personas que están buscando piso".

La agencia inmobiliaria de Barcelona también destaca el "miedo" de los propietarios a alquilar las viviendas debido a la inseguridad jurídica. "Les hace pensar que vendiendo se quitan de problemas, o lo alquilan temporalmente seis meses o un año y luego ven qué hacen. Muchos de los propietarios que tenían viviendas en alquiler han pasado a la bolsa de venta".

Esta situación les ha llevado a optar por no publicar los anuncios de los pisos de alquiler: "Cuando he cometido el error de poner un anuncio de un piso de menos de mil euros, hemos recibido hasta 300 llamadas y correos. No damos abasto para hablar y darles un buen servicio. Tenemos que hacer algo en profundidad, no veo la luz del final del túnel", sentencia.

Por su parte, Guifré Amat, director general de Amat Inmobiliaris, admite que "la oferta está bajo mínimos" hasta el punto de que se ha cambiado la forma de comercializar: "Cuando entra un piso, lo ofrecemos a nuestra lista de clientes. Se alquila pronto".

Su inmobiliaria gestiona 2.600 inmuebles y destaca que "cada vez" hay más gente interesada en venir en Barcelona, pero las zonas tensionadas no ayudan, por lo que piden un "cambio de mentalidad" en la sociedad y administraciones, que "han demonizado a propietarios y deben ser aliados".

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