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Ser el alcalde no es la única distinción por la que conocen a Francesc Larios en La Pobla de Montornès (Tarragona), donde se ha convertido en el hombre más fuerte de la localidad de 3.000 habitantes tras alzarse por segundo año consecutivo en un torneo que ha generado furor entre los vecinos.
El artífice de esta competición que elige al hombre y a la mujer más fuerte es Èric Vicens, el concejal de Deportes que en 2016 llegó a ser campeón de Europa de press banca por la Asociación Profesional de Fisioculturismo de España.
"Tengo el material de cuando entrenaba y siempre iba detrás del alcalde para hacer el torneo. Una vez entré a la alcaldía, en junio del año pasado, pude sacar el título propio del municipio de hombre y mujer más fuerte. No nos cuesta dinero organizarlo", explica el concejal del municipio catalán, donde el año pasado realizaron la primera edición del torneo.
La primera persona que se apuntó fue nada más y nada menos que el propio alcalde. "Me gusta competir y hacer deporte. Verme bailar o disfrazado nadie me verá, pero en otras cosas sí. Le comenté que me apuntase y luego ya me dijese qué teníamos que hacer", recuerda Francesc Larios, sobre una competición que ha servido de cohesión al municipio catalán, donde los participantes se enfrentan a diferentes pruebas en las que destaca la fuerza bruta acompañada de velocidad.
El encargado de montar el circuito es el concejal: "Todos los que han participado ninguno entrena. Es arrastrar, estirar y levantar, pero muy básico. Se divide en cinco pruebas, y siempre intento valorar una fuerza de coordinación. Las elijo yo en base al material que tengo".
Los participantes pasan de completar un circuito en zizgag con una carretilla cargada de más de 50 kilos a llevar estructuras de hierro en las manos, bidones o incluso arrastrar un camión de la brigada municipal de tres toneladas durante 20 metros. "No parece tan duro como parece, pero es vistoso. Nos ven a todos haciéndolo como podemos. No lo había probado antes del torneo porque tampoco sabíamos qué pruebas había. Esta llamó la atención a los participantes y al público", añade el alcalde.
Diferentes modalidades que han dado como ganador en los dos años de competición a la misma persona: el alcalde de La Pobla de Montornès. Una hazaña que para los propios vecinos es graciosa, aunque depende del punto de vista de cada uno. "Es como todo, el que ve las cosas bien te hace la broma y el que siempre lo ve mal aprovecha para criticar", admite Francesc Larios.
Sin embargo, la mayoría de vecinos ya saben a quién recurrir en caso de fuerza mayor. "Ha ganado las dos ediciones, pero la primera. no tuvo el mismo impacto, este año ha hecho más gracia. Siempre dicen que si nos ataca el municipio vecino, él es el que saldrá primero a defendernos. Es el que está más fuerte", bromean.
El torneo una a los vecinos en una jornada donde el ingenio es más relevante que el presupuesto económico para llevarlo a cabo. "Es la demostración de que con un poco de ganas se pueden hacer actividades que tienen repercusión. A veces hacemos cosas suficientemente relevantes para el municipio, y pasan desapercibidas, y otras así llama la atención de todo el mundo", opina el alcalde, quien no duda en presentarse el próximo año.
"Todos nos picábamos un poco porque sabíamos que al día siguiente nos veríamos haciendo un café o en cualquier acto. Uno es el electricista y otro es el alcalde, tiene un punto más gracioso", añade Francesc sobre la última edición, en la que solo se presentaron a la competición cuatro hombres y una mujer.
De este modo, en la categoría femenina ya había ganadora antes de empezar la prueba, por lo que de manera automática se convirtió en la más fuerte del municipio, aunque quería ir más allá al no poder superar a otras contrincantes. "Estaba muy fuerte y me dijo que le pusiera con ellos. Levantó los mismos pesos, ya había ganado antes de comenzar, pero hizo todas las pruebas igual", sentencia Eric.
El torneo ha tenido una gran aceptación y desde el municipio confían en que el año que viene volverá con más fuerza, aunque esperan que se animen más participantes: "El título es el de más fuerte, se tiene que presentar quién quiera, sea el peso que sea. Cuando tienes poca gente no puedes hacer categorías. La gente le gusta verlo, pero tienen mucho sentido del ridículo a la hora de participar".
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