Los ocupas de la Massana denuncian que su desalojo aumentará la presión turística en Barcelona

  • Los entidades consideran que el edificio es "la única garantía" de que el espacio no esté destinado al beneficio privado o al turismo

  • El consistorio ha iniciado los trámites para desalojar un inmueble que permanece ocupado por varias entidades desde 2020

  • Las asociaciones que ocupan la antigua escuela Massana organizan diferentes actividades sociales en el interior del inmueble

El Ayuntamiento de Barcelona ha iniciado los trámites para desalojar la antigua escuela Massana, un inmueble ocupado desde el 2020 por varias entidades alternativas que denuncian el aumento de la presión turística en el barrio del Raval en caso de desalojo.

"La Antigua Massana es la muestra que la única garantía que los espacios no estén destinados al beneficio privado y al turismo, y que se vuelvan accesibles y útiles para la gente del barrio, es que estén gestionados por la clase trabajadora, puesto que solo nosotros podemos garantizar nuestros intereses", ha explicado la entidad en un comunicado publicado en redes sociales.

Critican la gestión de Jaume Colboni

Las entidades que ocupan las dependencias municipales del inmueble han criticado la gestión del alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, quien "se dedica a poner una alfombra roja a los empresarios, con proyectos como la Copa América o la ampliación del Macba, que negocian con la vivienda y el turismo, explotando y expulsando los trabajadores de nuestros barrios".

Derrocar un edificio para construir un túnel que facilite el flujo de turistas

Por ello, ponen en relieve la antigua escuela Massana, donde organizan diferentes actividades sociales. Desde un gimnasio popular, clases particulares, sindicato de vivienda y talleres para detener desalojos: "Toma más relevancia que nunca la importancia de espacios como la Antigua Massana y evidencia la necesidad urgente de hacer efectiva la concesión".

Las entidades también denuncian que Jaume Collboni y el tercer teniente de alcaldía, Albert Batlle, "muestran una vez más que la única herramienta que tienen es la represión y las mentiras para facilitar el desalojo y llevar a cabo un proyecto especulativo en la Plaza Gardunya".

"Derrocar un edificio para poner un bar y un árbol o para construir un túnel que facilite el flujo de turistas que vienen del mercado de la Boqueria hacia el barrio del Raval son algunos de los proyectos que durante los últimos años se han puesto sobre la mesa por parte de los grupos parlamentarios", añaden las entidades en el comunicado.

Sobre los trámites para el desalojo, los colectivos y las organizaciones que conforma la Antigua Massana han destacado que "bajo ningún concepto el inicio del procedimiento administrativo significa una paso hacia atrás en la lucha por el espacio" y que "confirma más que nunca la necesidad "que tienen para "luchar contra la explotación y el ahogamiento constante".

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