Carlos, un menor de 14 años de Écija (Sevilla), nació con hidrocefalia y parálisis cerebral. Es ciego, no camina, no come por la boca y no habla. Su situación es muy complicada por las enfermedades con las que convive. Por ello, Rocío Herrera, su madre, se propuso mejorar su calidad de vida y encontró un tratamiento especial en un hospital de Bangkok, en Tailandia, con el que el pequeño podría "obtener movilidad y poder ver algo de luz estimulando sus nervios ópticos". Sin embargo, el tratamiento es muy costoso, y a esos gastos habría que sumar el viaje y la estancia en el país asiático. La progenitora es consciente de la dificultad del proceso, pero no pierde la esperanza de viajar allí y pide la colaboración ciudadana.
"Solicito su ayuda para poder llevar a mi hijo a Tailandia y que se pueda someter a un tratamiento de células madre en un hospital de Bangkok. La duración del tratamiento es de 22 días. El niño será hospitalizado y tratado. El coste del tratamiento es de 33.000 euros, a lo que hay que sumar la estancia allí y los vuelos. Les agradecería mucho su ayuda porque, como madre, tengo que intentarlo todo por mi hijo", señala Rocío Herrera en la campaña de recaudación de fondos que ha abierto en GoFundMe, donde ofrece detalles de su situación.
El objetivo es recaudar 50.000 euros y, por ahora, han conseguido más de 3.100. Según ha explicado Rocío Herrera en sus redes sociales, cada vez están más cerca de poder acometer el viaje y el tratamiento. Incluso tendría que afrontar ya algunos pagos: "La semana que viene tengo que ingresar el 20% del costo del tratamiento. Y lo restante 30 días antes de irnos. Mil gracias", ha indicado este jueves en su perfil de Facebook, donde también comparte las iniciativas de compañías que se ofrecen a ayudarla, como unas camisetas en apoyo a Carlos.
Para entender un poco mejor la situación de Carlos, hay que saber que la hidrocefalia es la acumulación de líquido dentro de las cavidades profundas del cerebro. Esta enfermedad le provocó lesiones y que padeciera enfermedades virales. Además, la parálisis cerebral hizo que perdiera la visión y que presentara dificultades severas en la comunicación, la movilidad y la alimentación (no puede comer por vía oral). El tratamiento podría cambiarle la vida y su madre, armada de coraje, quiere intentarlo. Sueña con que 'el viaje de Carlos' sea una completa realidad.
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