Un colegio de Sevilla, convertido en "pasaje del terror": una niña se cayó al romperse un váter
"Esto sí da miedo y no Halloween", la denuncia por el estado de un colegio en Sevilla
Las familias describen con fotos los numerosos desperfectos que tiene el centro
Hay "goteras, el techo de un patio está derruido" y sólo hay un baño disponible en infantil
Cuando queda una semana para el día de Halloween, un suceso reciente ha llevado a familias de alumnos de un colegio de Sevilla a denunciar públicamente el "pasaje del terror" en el que se ha convertido el centro educativo.
Una niña de siete años se cayó al romperse el váter de un aseo, de forma repentina, en el CEIP San Pablo. Así lo relataron sus padres al Diario de Sevilla para dar a conocer un caso que recuerda a otro que contamos de un instituto de Tomares.
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Porque desde el Ampa La Soleá llevan un tiempo compartiendo en sus redes sociales los numerosos desperfectos que hay. Y con los que tienen que convivir los pequeños en su día a día cuando van a clase.
Algunos suponen riesgos para su seguridad. Como ocurrió cuando la menor sufrió el accidente al sentarse en el WC. Éste se derrumbó por completo, causando un fuerte ruido y lo peor es que ese era uno de los pocos que dan servicio.
"El tema de los baños merece un punto aparte, ya que en infantil sólo funciona uno y los de primaria están en un estado...", lamentan los familiares que llevan a sus niños al colegio. Tanto en las instalaciones interiores como exteriores hay problemas.
Por eso, reconocen que "esto sí da miedo y no Halloween", antes de explicar que tienen "humedades, goteras, pintura que se desprende y el techo derruido en el patio de infantil". De este último se ha cumplido ya un año sin reponerlo.
Admiten estar "desesperados y aburridos"
Los padres admiten estar "desesperados y aburridos" de la administración pública por no solucionarles todas las deficiencias "que se han hecho ya habituales, desgraciadamente". En el suelo de los patios se pueden ver socavones.
Tal y como se observa en varias imágenes difundidas por el Ampa La Soleá, en una alcantarilla también hay grietas y agujeros. Cada vez que llueve "entra agua" al centro educativo, dadas las filtraciones que se producen en los tejados.
Además, el pasado fin de semana vandalizaron la puerta de acceso. "No vienen a arreglarla", aseguraron en la publicación hecha este jueves. "Tampoco tenemos portero/a que pueda estar pendiente de entradas y salidas", añaden.
"En breve informaremos de posibles acciones de protesta", concluyen unas familias que pretenden ir más allá en sus reivindicaciones. Sandra es una madre afectada y reconoce que sus hijos "tienen que estar todos los días en condiciones tercermundistas".
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