El servicio público de autobuses del Ayuntamiento de Sevilla (Tussam) sigue sufriendo las consecuencias del ambiente crispado que se respira en las peores zonas de las Tres Mil Viviendas. Hace solo unos días que uno de sus vehículos sufrió varios impactos de balines que llegaron incluso a romper uno de los cristales: "Esto ya no es cuestión de nuestra seguridad, sino también de la de los usuarios que viajan en el interior", dice Isidro Fernández, portavoz de la Agrupación Sindical de Conductores de la capital.
"Ante esta situación, ponemos en sobre aviso a los vecinos de la zona de posibles medidas contundentes que afectarán a los recorridos de las líneas por la zona", se puede leer en el comunicado que han hecho público para pedir una reunión con los responsables del Ayuntamiento.
Aseguran que hace años que vienen denunciando la situación de indefensión que viven al tener que entrar sin ningún tipo de seguridad en las calles más conflictivas del barrio. Son muchos los episodios de violencia que han vivido en los últimos años y que ahora se han visto acentuados por el ambiente de tensión que se respira tras el sonado tiroteo de hace días.
"Los conductores de Tussam hemos solicitado la modificación del recorrido de las líneas 30, 31, 32 y la nocturna A5 para evitar la zona de las Vegas y la zona de Luis Ortiz Muñoz y Padre Juan Sebastián Bandarán en la zona de los verdes, entendiendo que esa sería una solución que minimizaría el riesgo sin producir mucho perjuicio a los habitantes de la zona". Son los cambios fundamentales que piden para tratar de dar el servicio sin poner en riesgo su seguridad ni la de los usuarios.
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