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El último detenido tras la segunda redada de la semana en el barrio de las Tres Mil Viviendas de Sevilla ha quedado hoy en libertad. Varios tiroteos en plena calle generó el miedo entre los vecinos de la zona sur de la capital andaluza.
Por eso, la Policía Nacional efectuó un gran despliegue en días distintos. El primero acabó con hasta diez arrestados, mientras que el segundo se llevó a cabo ayer viernes. Enmarcados ambos en la lucha contra el narcotráfico.
Los disparos con armas de guerra alarmaron a los residentes. Fuentes cercanas a la investigación informaron a EFE que este 18 de octubre se dio continuidad a la primera actuación, que consistió en registros a domicilios donde podían vivir los implicados.
Concretamente en las zonas de Murillo y de Martínez Montañés, los agentes terminaron arrestando a unas 12 personas, tras las 16 entradas a viviendas y el decomisado tanto de armas como de drogas.
Esta operación denominada Vulcano, en su fase de ayer, se extendió a puntos como la barriada de Palmete y el municipio de Carmona. Un portavoz policial ha indicado que culmina varias investigaciones previas en marcha.
Todas relacionadas con el tráfico de sustancias estupefacientes, las plantaciones ilegales de marihuana y la tenencia ilícita y el uso de armas de fuego. Una vez listas las diligencias, los últimos arrestados pasaron a disposición judicial.
El Juzgado de Instrucción 13 de Sevilla ordenó este viernes el ingreso en la cárcel de uno de ellos. Mientras que otros dos quedaron en libertad provisional. Al igual que el hombre que también hoy ha salido a la calle.
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