La Policía Nacional ha detenido en Granada a un hombre de 51 años y nacionalidad española como presunto autor de un delito de daños tras provocar desperfectos por más de 19.000 euros en las fachadas del local comercial de la empresa de la que había sido despedido.
El hombre, que actuó en venganza tras un despido disciplinario, realizó pintadas ofensivas en dos fachadas del local utilizando pintura en spray, además de haber vertido pintura esmaltada y aceite en la puerta del establecimiento, hechos por los que ya ha sido puesto a disposición judicial.
Los hechos comenzaron a finales del mes de febrero, cuando el administrador de una empresa denunció una serie de pintadas ofensivas dirigidas al gerente, realizadas con spray de color rojo y negro, sobre las dos fachadas del inmueble en que radicaba su empresa.
También denunció el vertido de pintura roja esmaltada y aceite en la puerta de acceso del local, habiendo alcanzado ambas sustancias el interior del establecimiento. Un mes más tarde las pintadas se repitieron, dando lugar a una nueva denuncia.
En el transcurso de la investigación policial se logró identificar al presunto autor, un antiguo empleado de la empresa que fue objeto de un despido disciplinario tras haber sido descubierto trabajando por su cuenta durante periodos de incapacidad temporal, mientras mantenía a la vez una relación laboral con la empresa.
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