Rocío Carrasco ha contado en este último programa de 'Montealto' con el apoyo de su verdadera familia, las personas con la que ha contado ininterrumpidamente desde que es una niña y que jamás la han abandonado: los Mohedano y Jurado que se mantienen alejados de las cámaras.
Las primas de Rocío Carrasco, los tíos de Rocío Jurado o las amigas de infancia de la cantante son solo algunas de las personas que aparecerán en el documental 'En el nombre de Rocío' para contar la verdad de la más grande en boca de su hija.
Para Rocío Carrasco esta es su verdadera familia, personas que jamás se han mostrado en televisión hasta hoy, el momento en el que Rocío Carrasco ha decidido poner fin a su silencio y contar la verdad de los Mohedano más mediáticos.
Rocío Carrasco no ha tenido pelos en la lengua al reconocer abiertamente que para ella Amador y Gloria no son su familia: "Son una manada de alimañas que nunca me han querido, que se quedaban conmigo y me cuidaban para ganarse el favor de mi madre".
Jorge Javier Vázquez ha querido saber qué opinaba Rocío Jurado de sus hermanos, de Gloria y Amador, y la respuesta de Rocío Carrasco ha sorprendido al presentador: "Ella les quería porque eran sus hermanos, pero con quien más afinidad y más cómoda se sentía mi madre era con Rosa Benito pese a no ser de su sangre".
Rocío Carrasco, sin entrar en grandes detalles, ha explicado que el carácter de Gloria Mohedano, la hermana pequeña de Rocío Jurado, no es sencillo: "No es agradables, es muy amarga, a mi madre había muchas cosas que no le gustaban de ella y me lo hacía saber, me lanzaba indirectas de vez en cuando".
La hija de Rocío Jurado no se ha dejado nada en el tintero en este último programa de 'Montealto'. Rocío Carrasco ha tenido palabras para todos esos que se han calificado a sí mismos como miembros de su familia pero que no han estado a su lado en los peores momentos.
Uno de ellos es José Ortega Cano. Aunque el que fuera marido de su madre llegó incluso a declarar ante el tribunal de La Rota a su favor, años más tarde olvidó por completo sus apoyos a Rocío y se acercó cada vez más a su verdugo, Antonio David Flores. Ahora, Rocío habla claro sobre el marido de su madre: "Él ha dicho de mí que yo soy una niña que se portó irregularmente y puede ser, las cosas de la edad, pero yo nunca he bebido, ni cogido coches, no he hecho nada ilegal ni delictivo".