Ginés Corregüela ha vuelto a convertirse en noticia. En esta ocasión, el conocido como 'Rey de los bocadillos' ha protagonizado en distintos platós duros enfrentamientos con Yaiza Martín, la que fuera su pareja en los últimos años y con la que mantiene en estos momentos una dura guerra.
Al parecer, el distanciamiento de Ginés con su familia (su ex mujer y sus hijas) ha provocado que el empresario se replantease su situación y decidiese que poner tierra de por medio con Yaiza era la mejor solución, ya que un acercamiento de la canaria con la familia del andaluz era algo impensable.
Y es que desde que saliera a la luz el romance de Ginés con la entrenadora canaria, las muestras de rechazo mutuas entre la pareja de Ginés y su familia ha sido constantes. Las hijas de Ginés, y más concretamente Miriam, nunca han entendido que su padre engañase a su madre con varias mujeres y prefiriese la compañía de Yaiza en lugar del calor del hogar familiar.
Para Miriam, tanto Yaiza como Ginés han sido los culpables de los sufrimientos que tanto ella como su madre y el resto de familiares han padecido en los últimos años: "No le puedo perdonar el daño que nos ha hecho, no es algo que pueda olvidar de la noche a la mañana".
Padre e hija siguen dolidos. Miriam no es capaz de olvidar el daño que su padre les ha hecho públicamente y Ginés no puede comprender que su hija pequeña se haya mostrado tan dura con él en los platós de televisión. Ahora que Yaiza Martín ya no está en la vida del 'Rey de los bocadillos', Miriam ha aprovechado para traer a su padre hasta 'La vida sin filtros' y hacerle ver el daño que le ha hecho todo este tiempo.
Ginés, que no tenía ni idea de quién quería sorprenderle en el programa de Cristina Tárrega, ha aguantado las lágrimas al comprobar que la persona que necesitaba verle era efectivamente su hija pequeña, Miriam Corregüela. Ginés le explicaba instantes antes a Cristina Tárrega que no está atravesando precisamente por un momento sencillo y que se siente triste:
"Estoy triste, no estoy bien, está siendo una racha complicada. No sé quién puede estar aquí para hablar conmigo pero si tuviera que elegir a alguien elegiría a mi hija la chica, a la Miriam".
Tal y como Ginés deseaba, la persona que esperaba al otro lado no era que su hija Miriam. Padre e hija han permanecido 100 segundos en completo silencio, mirándose y diciéndose con los ojos lo que han callado durante mucho tiempo. Miriam, que no ha podido evitar las lágrimas, ha rechazado levantarse a abrazar a su padre porque, tal y como ella misma ha explicado, verle supone revivir el dolor que ha sentido durante todos estos meses. Ginés, que no pensaba rendirse, se levantaba para acercarse a su hija y ofrecerle su abrazo. Cristina Tárrega le pedía entonces a Miriam que perdonase a su padre: "Tú le necesitas y él a ti, mira sus ojos, están tristes porque no te tiene a su lado, Miriam".