‘La última cena’ ha puesto en apuros a sus comensales. Estábamos buscando a la mejor actriz y lo hemos hecho poniéndoles delante dos copas, una de ellas dulce y otra muy, pero que muy picante. Con su actitud, tenían que lograr engañar a los comensales y Cristina Cifuentes ha dejado a todos con la boca abierta.
Cristina elegía una copa, daba un sorbito y nos decía: “¡Qué rico está!” Tras probarla, se tomaba hasta la última gota de su bebida, demostrando que se lo había bebido todo y nos mostraba una enorme sonrisa.
El voto era unánime: era imposible que la copa llevara picante ¡Pero sí que lo llevaba! ¡Y muchísimo! “¡Dame el agua!”, gritaba nuestra comensal dejando a todos con la boca abierta.
Y, si una copa era picante, la otra tenía que ser dulce así que, para demostrarlo, Paz pedía a Nuria Marín que se bebiera la otra copa. Aunque intentaba excusarse diciendo que era “muy dulce”, Nuria acababa por bebérselo todo y aunque conseguía disimular ¡También picaba muchísimo!