Cristina Cifuentes nunca ha cocinado (o al menos no lo ha hecho en 30 años) pero lo ha dado todo en los fogones de ‘La última cena’. Además, se ha sincerado sobre ella y la hemos conocido un poquito más. El que cocina en casa es su marido y no solo eso: “Me lleva el café por las mañanas a la cama, que esto tiene más mérito, desde hace 33 años todos los días”.
Cristina reconoce que los últimos tres años han sido “muy complicados” tras su salida de la política pero es consciente de que la vida son “etapas” que empiezan y acaban: “Me di cuenta de que quería vivir una vida diferente porque lo único que hacía era trabajar, que lo hacía muy bien y lo hacía encantada”.
Llegó un momento en que se dio cuenta de que no tenía vida: “Tengo con mis hijos cierta deuda porque no les he dedicado el tiempo que debería y estoy intentando recuperarlo”. Ahora se queda con lo bueno y, tras reflexionar, cree que si volviera atrás habría cometido otra vez “los mismos errores”.
Era la primera vez en pantalla para todos y Javier, su marido, abordaba las palabras de Cristina sobre el tiempo perdido: “Eso todos, los autónomos también le echamos muchas horas pero lo importante es que le tiempo que pasas con la familia de tiempo de verdad”.
Su hijo ve a su madre bien, contenta y pasándoselo “fenomenal” en la cena: “La veo disfrutando en algo que nunca ha hecho”. Y es que recuerda las dos ocasiones que ha cocinado en toda su vida, cuando tenía 14 años y en el 2017: “Encima hizo el mismo plato, un sándwich mixto con huevo frito”.
Su hija Cristina reía y nos hablaba de ese “vínculo especial” con los padres: “Si no estamos ahí los unos con los otros para apoyarnos, nadie lo va a estar”. En cuanto a las ausencias, explicaba que de pequeña podía no comprender, pero con el tiempo sí: “Ves la dedicación cuerpo y alma que tenía a su trabajo, lo hacía con pasión y devoción. Lo importante no es la cantidad de tiempo sino a nivel cualitativo y a mi madre no se le puede reprochar nada porque le tiempo que ha tenido lo ha dedicado al 100% a su familia”.
Pero ¿Cómo vivieron su salida de la política? Cristina recordaba que no podían dar crédito y sentía una mezcla de enfado e incredulidad porque todo terminase de aquella manera: “Fue frustración y rabia, pero apoyo 100% en cualquier decisión que ella tomase”.
Desde el plató, Cristina les daba las gracias por su apoyo y se despedía diciéndoles: “Sois lo mejor que tengo en la vida (...) Se me ha saltado la lagrimita, ellos siempre están y eso es muy de agradecer”.