Marina e Isaac tuvieron un flechazo nada más verse en República Dominicana. A las pocas horas de comenzar el reality, la novia de Jesús ya había puesto los ojos en 'Lobo' y no podía disimular su atracción. "Tiene ese punto de macarra que a mí me encanta, no lo puedo negar, es un chico con el lado bueno y lado malo que digo yo que es necesario", confesaba la andaluza.
Marina y el soltero se sentaban juntos en la mesa de la cena y compartían momentos muy cómplices. La participante cogía un plátano y entre risas comentaba al tentador: "¿Es muy pequeño, no?", reía. Él se tapaba los ojos con las manos y tampoco podía evitar reírse.
Mientras, en la otra villa, Jesús contaba a las solteras cómo había sido su primer encuentro con Isaac. "Me ha chocado cuando ha dicho que tenían afinidad. Y luego cuando él dice que claro que la va a cuidar porque va a ser suya…Como mucho serán amigos. No le puedo recriminar nada pero no es plato de buen gusto", decía.
Lo de Marina e Isaac no quedó ahí. Durante la primera fiesta que se organizó en Villa Montaña, el soltero se aproximaba a Marina para sacar conversación. En 'El debate de las tentaciones' hemos visto cómo acaban quedándose solos charlando entre miradas que denotan su clara atracción.
"No me mires tan intenso", le pedía Marina a Isaac con una risa nerviosa. Él le decía que no podía evitarlo. "Una mirada no me pone nerviosa y por eso me preocupa", confesaba ella después.