Las primeras hogueras han llegado a ‘La isla de las tentaciones 7’ y las chicas han podido ver cómo están actuando sus parejas en ‘Villa Playa’ con las solteras.
Cuando llegaba el turno de Ruth, ella tenía claro que su relación con Niko es “indestructible” y afirmaba que lo que más le preocupaba era terminar viendo “una conexión más allá de atracción con otra chica” aunque aseguraba querer ver que su pareja se está abriendo, está disfrutando y poniéndose al limite en esta experiencia.
Ruth aseguraba que quería ver con sus compañeras las imágenes, a las que les pedía que estuvieran muy atentas. En un primer momento, no veía nada que le hiciera mucho daño en la actitud de Niko aunque si recalcaba que le daba miedo que “no mirase a los ojos a la tentadora que más le gusta”, Tamara porque eso puede significar algo.
Al ver más imágenes, la conexión con Tamara y sus acercamientos con bailes y juegos, Ruth terminaba completamente rota y haciendo una clara pregunta a sus compañeras: “¿Eso es demostrar que el amor es verdadero?”. “Según tú lo estás demostrando no, al mismo nivel no estáis”, respondía Ana y a ver las lágrimas de ella, Sandra Barneda le preguntaba por lo que más le dolía de las imágenes: “Duele mucho”.
“La conexión que tiene con ella, es evidente porque la chica le gusta. Se gustan mutuamente, se buscan. Veo una falta de respeto el juego del hielo, el de chuparse. Yo he bailado con los solteros, pero no bailo así porque él baila así cuando una chica le gusta. Te juro que me duele por la barrera que hemos puesto del respeto, decir: ‘no hagas lo que no te gusta que te hagan”, explicaba Ruth visiblemente mal.
Ruth explicaba a la presentadora que cree que “Niko no le está respetando” porque ella a la persona que ama la pone muy arriba, algo que ya duda hacer con su pareja: “Le voy a bajar pero en ascensor”. Y es que opina que la conexión de su novio con la tentadora puede ir a más. Y se rompía al hablar con sus compañeras: “Yo confiaba al cien por cien. Yo necesito un hombre, no un niño”. Y es que ver las imágenes de él han sido un choque de realidad para ella que le servían para darse cuenta de quién es él, según confesaba Ruth.