Las solteras ya se encuentran en Villa Playa junto a los chicos. Si hay algo que hace activar las alarmas en las parejas -y nunca mejor dicho- es la famosa 'Luz de la tentación'. Y no ha tardado en sonar. Algunos como Borja, pareja de Ana, tienen claro lo que buscan y quieren: "Las solteras quiero que sean una verdadera tentación y que se pueda hablar de todo con ellas. Que me tienten de verdad".
Por otro lado, en Villa Montaña, Ana se abre en banda antes el resto de chicas explicando cómo es realmente Borja por dentro: "Yo no le he llegado a ver llorar...". Y recuerda en qué le decepcionó su pareja: "Me dijo que se iba a comer con los compañeros de trabajo y que había una chica con la que había estado. Pues se fueron a un chalet. Y yo me enteré por las historias". Esto ha hecho sonar la luz verde en la casa de los chicos, lo que les ha hecho especular y sospechar sobre quién sería el afectado o de quién estarían hablando mal.
Llega la noche, el momento en donde las dos Villas se encienden por completo y las parejas intentan pasárselo lo mejor posible junto a los solteros. Bailan, se mueven, interactúan y sobre todo, disfrutan. Algunos, como David, no se esconden: "Primera fiesta de Villa Playa. Vamos a recordar viejos tiempos. Quiero que esta fiesta sea la mejor".
Borja ya tiene su preferida: Gabriela es la chica que más le ha llamado la atención y le parece una "chica divertida". De hecho, le ha preguntado a la soltera si ha ido alguna vez de fiesta por Valencia, a lo que ha respondido que no, pero que no tardará en ir. Borja le ha confesado a Gabriela que hay cosas que está haciendo a estas alturas que ya le pueden molestar a Ana. Y ha generalizado: "Las cuatro tienen un carácter...". Esto último ha hecho que se encienda la luz verde en la casa de las chicas.
En Villa Montaña, Andrea se pensaba que la luz sonaba por ella y ha originado un momento de tensión entre las chicas. Pero finalmente se han calmado y han intentado olvidarlo, hablando de cómo son sus parejas y aumentando la confianza entre ellas. Mientras tanto, en Villa Playa las favoritas se suceden entre los chicos. A Álvaro le ha gustado Mónica, que le parece una chica espectacular: "Si no tuviera pareja podría llegar a gustarme".
Pero no es por eso por lo que ha sonado la luz amarilla en la casa de las chicas. Ha sonado por el masaje de Gabriela a Borja en la piscina. Esto ha hecho saltar las alarmas en Villa Montaña, puesto que ya es la segunda vez que sonaba.