Durante toda la noche ha continuado la búsqueda del marinero desaparecido en el naufragio del Vilaboa Uno frente a las costas de Santander. Los buzos de la Guardia Civil bajarán en las próximas horas pero no podrán llegar hasta el barco, a unos 120 metros de profundidad. Desde las ocho de la mañana está en funcionamieno el dispositivo completo de búsqueda.

Sospechan que el cuerpo del tripulante desaparecido del Vilaboa Uno, de origen senegalés, podría estar en el interior, según los testimonios de sus compañeros supervivientes.

El Vilaboa Uno salió a faenar a media noche del domingo al lunes y cuatro horas después, cuando estaba a seis millas de la costa de Santader, una vía de agua en el casco provocó el hundimiento del buque en unos pocos minutos.

Pedro Antonio, patrón del Siempre Nécora, fue el primero en acudir al rescate con su barco. Cuando llegaron al lugar del naufragio ya no vieron la embarcación, que ya había naufragado y en el mar encontraron a siete de sus diez tripulantes. “La gente estaba flotando con los chalecos, pidiendo ayuda… Les hemos dado nuestra ropa para la hipotermia que tenían”, ha contado.

Ellos rescataron a uno de los fallecidos, un marinero de Santander de 57 años, que estaba a punto de jubilarse. Trataron de reanimarle pero “era imposible, no había forma”, señala Pedro Antonio.

El otro fallecido en el naufragio del Vilaboa Uno es el cocinero del barco, un hombre de origen senegalés.

En puerto todos se preguntan cómo se produjo un naufragio tan rápido en un barco que todavía no llevaba carga a bordo y en una noche con el mar en calma.

Esta noche, se ha mantenido en la zona un dispositivo reducido con el buque de Salvamento Marítimo "María de Maetzu" y el buque hospital "Juan de la Cosa", del Instituto Social de la Marina. Con la luz del día se ha procedido al despliegue de todos los medios marítimos y aéreos, que se van a reforzar con buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) de Asturias, que incluyen, además de esas dos embarcaciones, otros dos helicópteros, pesqueros y mercantes, patrulleras y un avión de la Guardia Civil y lanchas de prácticos.

Los GEAS entrarán al agua a lo largo del día de hoy para valorar la situación. El pesquero naufragado está hundido a 120 metros de profundidad, a donde los buzos no pueden llegar.