El médico Jesús Candel, más conocido como ‘Spiriman’ en las redes sociales, ha fallecido a sus 46 años. El mediático doctor anunciaba en agosto de 2020 que padecía un “cáncer muy agresivo y expandido” por todo el cuerpo. Tan solo dos años después, el profesional sanitario ha fallecido a consecuencia de las complicaciones de esta enfermedad.

Según se ha confirmado, el fallecimiento del médico granadino se ha producido el jueves 13 de octubre en la localidad andaluza de Albolote, en Granada. El funeral de Spiriman se celebrará este sábado 15 de octubre a las 11 en el tanatorio de Granada. Nada más hacerse pública la muerte de Jesús Candel, las redes sociales se llenaban de mensajes en los que los usuarios lamentaban el fallecimiento y trasmitían su apoyo y cariño a los familiares del profesional sanitario.

Fue en agosto de 2020 cuando por primera vez anunciaba su batalla contra la enfermedad, y seis meses más tarde, en febrero de 2021, cuando compartía que estaba superándolo. Sin embargo, justo antes del verano de 2021 informaba a través de sus redes sociales de haber padecido una recaída en la enfermedad.

“El cáncer de pulmón que padezco desde hace más de un año es muy agresivo y me atacó duramente con múltiples metástasis por todo mi cuerpo, a las que fui venciendo poco a poco. Ahora ha vuelto con fuerza y se vuelve a extender”, explicaba a la vez que señalaba el “estrés crónico” que vivió antes de enfermar como “la causa de que apareciera el cáncer” en su vida.

Antes de convertirse en 'Spiriman' y en ser un personaje bastante polémico en las redes sociales, Jesús Candel era todo un referente en las protestas sanitarias de Granada. En sus perfiles sociales, el sanitario granadino compartía publicaciones por la lucha de la sanidad pública. Sin embargo, desde la llegada de la pandemia de coronavirus comenzó a tener mucha más notoriedad y repercusión debido a los mensajes que él mismo escribía y compartía a través de sus perfiles en las distintas plataformas sociales.

Una de sus mayores polémicas ocurrió en octubre de 2020. Tan solo dos meses después de comunicar que padecía cáncer, Jesús Candel hacía estallar las redes sociales al publicar un mensaje en el que aseguraba que "el que se quiere curar de cáncer se cura y el que no, se muere".

Tras estas cuestionadas declaraciones, el profesional de la medicina añadía: "A cada uno le presenta una o varias batallas durante la enfermedad y por muy duro que sea, la actitud multiplica por 10 los efectos positivos de la quimio, la inmunoterapia, la cirugía o las terapias dirigidas".

Una vez hecho público este tuit y como se podía esperar, los usuarios criticaban sus palabras y 'Spiriman' recibía centenares de mensajes en los que cuestionaban las declaraciones de Jesús Candel.

Al ver la polémica generada, el doctor decidía responder a todos sus seguidores: "Sé que este mensaje está ayudando a los que quiero y pretendo ayudar con lo que vivo y que sufren cáncer como yo". Sin embargo, la red social del pájaro azul decidía suspender su perfil social al ver la polémica ocasionada.

En los últimos meses, su paso por las redes sociales se reducía al activismo por la sanidad pública. En sus publicaciones, Jesús Candel mostraba su labor y el trato y tratamientos que recibía por parte de la Unidad de Apoyo a Pacientes Oncológicos (UAPO), una fundación multidisciplinar que ayuda a pacientes oncológicos por medio del ejercicio físico y la fisioterapia.

En una de sus últimas publicaciones en sus perfiles se podía ver las terapias de rehabilitación que recibía por parte de los profesionales sanitarios.

Tumbado en una cama y recibiendo el masaje de un fisioterapeuta, 'Spiriman' mostraba los avances de su tratamiento y, a su vez, pedía la recaudación de fondos para "crear un Centro UAPO, donde los pacientes con cáncer de toda España puedan recibir un tratamiento integral entre médico, fisioterapeuta, psicóloga, nutricionista y preparador físico de forma individualizada".

En la web en la que se producía esta recaudación de fondos, se indica que todo lo recaudado irá destinado a los tratamientos de los pacientes oncológicos "para así poder tratar los efectos secundarios tan agresivos de los tratamientos que reciben y poder entrenar una fortaleza mental y física totalmente necesaria para afrontar el duro camino que se le presenta a un paciente".