Son tiempos complicados en lo que a economía se refiere, y sin duda uno de los factores clave de estos meses está siendo la inflación, con todos sus efectos. Por ejemplo, sobre el precio de las hipotecas y, en general, de préstamos y productos de crédito. Por eso muchas personas se preguntan qué movimientos es conveniente llevar a cabo para mantener su dinero a salvo y evitar que pierda valor. Desde luego la forma más sencilla de que tu dinero cunda cada vez menos en el escenario actual es mantenerlo 'quieto', tanto en nuestra cuenta bancaria como 'bajo el colchón'. En cualquier caso, si te preguntas cuánto dinero en efectivo se puede tener en casa, en este artículo damos respuesta a esta duda.

Cada vez es más difícil escapar a la digitalización de las transacciones monetarias: casi todos los movimientos de dinero pasan hoy en día por los distintos bancos y, de hecho, la necesidad de tener una cuenta bancaria para decenas de trámites (un contrato de alquiler, solicitar una hipoteca, cobrar tu sueldo...) es tal que ha provocado que hacerse una cuenta se haya convertido en un derecho en el marco de la UE, y no solo en una posibilidad. Atrás quedaron los tiempos en que podías quedar fuera de este circuito por no cumplir con determinados requisitos financieros o económicos.

Eso sí, el movimiento de dinero en efectivo sigue existiendo, aunque con límites cada vez mayores. Por ejemplo, es lo más habitual que los pagos de cualquier tipo se lleven a cabo a través del banco precisamente para que se puedan trazar: pagar mi alquiler o hipoteca, recibir mi sueldo, comprar un artículo en una tienda... El hecho de que cada movimiento quede registrado nos permite demostrar con facilidad su naturaleza y, a la vez, permite a Hacienda mantener un control férreo sobre las transacciones que se llevan a cabo cada día.

Nada impide, por otro lado, cobrar en efectivo o extraer el dinero de nuestra cuenta bancaria para mantenerlo custodiado en casa, aunque esta práctica pueda conllevar más inconvenientes que ventajas. Quizás el principal de ellos sea el hecho de que, si decides volver a ingresar este dinero en el banco más adelante, Hacienda pueda sospechar y pedirte explicaciones acerca de su procedencia, algo que resultará complicado si ha pasado cierto tiempo desde que sacaste el dinero del banco.

Así, en caso de que no puedas probar el origen del dinero y su tributación en el momento de percibirlo, Hacienda lo considerará una ganancia patrimonial no justificada que, como tal, deberá tributar por IRPF en el ejercicio en que lleves a cabo el ingreso. Por tanto, tributarás dos veces. Ten en cuenta que los ingresos de más de 3.000 euros obligan a la entidad a informar al Banco de España (y éste, a su vez, a Hacienda) sobre la cuantía exacta y motivo del ingreso. Además, a partir de los 500 euros Hacienda puede comenzar a hacer preguntas.

Si no tienes interés en realizar ingresos en tu cuenta bancaria, ten en cuenta que también te verás limitado a la hora de pagar en efectivo, ya que no podrás pagar más de 1.000 euros en tus transacciones con dinero en mano. Los billetes de 500 euros son, además, especialmente perseguidos, por lo que si eliges acumularlos para evitar un volumen elevado de dinero, tus compras y movimientos serán más sospechosos.

Eso sí, no existe un límite al almacenamiento de dinero en efectivo en tu hogar, siempre y cuando se haya conseguido de forma legítima y esté declarado a Hacienda. Pero, además de todo lo anterior, debes tener en cuenta riesgos reales como el de robo o el de que cualquier tipo de desastre doméstico o natural acabe con los billetes físicos que tengas acumulados. Si eres de los que prefiere tener el dinero en casa, elige un buen sistema de seguridad a prueba no solo de ladrones, sino de incendios y demás eventos. ç

Por último, sí existe un límite a la cantidad de dinero en efectivo que puedes llevar por la calle dentro de España, establecido en 100.000 euros. Si quisieras transportar una cantidad igual o superior por territorio nacional, deberás declarar este trámite. En el caso de querer llevar dinero en efectivo al extranjero o traerlo de otro país, la "salida o entrada en territorio nacional" desde el extranjero tiene un límite de 10.000 euros.