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La Guía Michelin 2025 ha anunciado durante su gala del 26 de noviembre que concede a diversos restaurantes en España su primera estrella, con la que se pretende destacar la excelencia culinaria y el compromiso con la gastronomía de alta calidad. Se trata de un total de 32 nuevas incorporaciones a la lista de restaurantes con estrella Michelin, y tocan los palos más diversos, aunque todos tienen algo en común: su gusto por la buena comida.
El norte de España continúa brillando como uno de los epicentros culinarios del país, y la Guía Michelin 2025 ha destacado el talento emergente de varios restaurantes que han logrado su primera estrella. En Tolosa, Amá, liderado por Gorka Rico y Javier Ribero, celebra la tradición vasca reinterpretada con técnicas modernas, ofreciendo una experiencia que aúna la esencia local con una visión contemporánea. Con dos menús degustación de 115 y 145 euros, este restaurante se convierte en un referente para quienes buscan autenticidad renovada.
En Donostia, la propuesta de IBAi by Paulo Airaudo, a cargo de Nicola Baron, introduce una perspectiva internacional que no renuncia a los valores de la sostenibilidad y la estacionalidad. Su menú, que oscila entre los 190 y 210 euros, refleja una cocina de autor vibrante y dinámica, consolidando a San Sebastián como un destino clave para los amantes de la alta gastronomía.
Burgos se suma al mapa de las estrellas con el Espacio Anexo a La Fábrica, un proyecto innovador de Ricardo Temiño. Inspirado en las rutas históricas de la provincia y la travesía personal del chef, este espacio ofrece un menú que por unos 90 euros transporta a los comensales a través de un viaje culinario entre tradición y modernidad.
Finalmente, en Santiago de Compostela, SIMPAR, de Axel Smith y Claudia Merchan, deslumbra con una propuesta creativa que pone en valor los sabores gallegos. La innovación es el eje de un menú que combina productos locales y técnicas contemporáneas, disponible por un precio entre 85 y 110 euros, pero con la posibilidad de añadir los ‘mejores callos del mundo’ por 12 euros. Este restaurante se posiciona como un imprescindible en la escena gallega, reflejando el auge de una cocina que apuesta por la excelencia y la originalidad.
Con esta selección, el norte de España demuestra que sigue siendo una región donde la tradición y la innovación conviven en perfecta armonía, atrayendo a los paladares más exigentes de dentro y fuera del país.
El noreste de España, con Cataluña y Aragón a la cabeza, destaca como un terreno fértil para la creatividad culinaria, con una nueva oleada de restaurantes que han conseguido su primera estrella Michelin. Esta región, rica en productos locales y tradiciones arraigadas, ofrece una variedad impresionante de propuestas que reflejan tanto el respeto por sus raíces como el deseo de innovar.
En el idílico enclave de Anciles, Huesca, Ansils, bajo la batuta de Iris Jordán, ha conseguido capturar la esencia de los Pirineos. Su cocina de montaña, cuidadosamente elaborada, utiliza productos locales para crear un menú degustación que por unos 70 euros ofrece una experiencia profundamente arraigada en el paisaje y la cultura del entorno, contando con otra versión de ‘Alta montaña’ por 95€. A pocos kilómetros, en Villanova, Víctor Manuel Ovalles sorprende con su propuesta en Casa Arcas, donde la tradición aragonesa se renueva con técnicas contemporáneas y tres menús degustación que oscilan de los 27,5€ a los 74,5€.
En Cataluña, la diversidad de propuestas es un reflejo de su riqueza gastronómica. Desde Girona, Divinum, con Arnau Casadevall e Isidro Soler al mando, reafirma el protagonismo de la cocina catalana. Cuenta con dos menús degustación, a 80€ y 135€, con opción de maridaje, y poniendo en valor la temporalidad de los productos locales y técnicas sofisticadas que elevan recetas tradicionales. En Sant Julià de Ramis, Raúl Sillero en Esperit Roca combina la gastronomía con el arte en un entorno singular, ofreciendo menús que oscilan entre lo salado y lo dulce, con 6 de un lado y 2 del otro, o al revés, por 170€ y 139€ respectivamente, garantizando una experiencia que trasciende el mero acto de comer.
En Sant Martí Sarroca, Andrés Torres lleva la tradición catalana a un nivel sublime en Casanova, donde los ingredientes locales se reinterpretan con técnicas modernas para crear un menú de gran delicadeza que ronda los 95€ y otro menú degustación algo más largo por 130€. Más al sur, en Alcanar, Citrus del Tancat destaca bajo la dirección de Aitor López, quien aprovecha la riqueza de los productos mediterráneos para ofrecer una experiencia centrada en los sabores del mar y la huerta, con menús degustación entre 75 y 94euros.
Barcelona, como es habitual, concentra varias de las nuevas estrellas. Entre ellas destaca Fishology, liderado por Riccardo Radice, con su enfoque en la cocina marina contemporánea y un menú degustación accesible por 78€ y otro más premium por 98€, con opción de maridaje en ambos casos. También en la ciudad condal, Mae Barcelona, de Germán Espinosa y Diego Mondragón, apuesta por la cocina de mercado con influencias internacionales, mientras que Prodigi, dirigido por Jordi Tarré, deslumbra con sus innovadoras texturas y sabores en un menú degustación que ronda los 80-110 euros. A esta lista se suma Teatro Kitchen & Bar, bajo la dirección de Oliver Peña, que fusiona la cocina mediterránea y asiática en un ambiente teatral, convirtiendo cada comida en un espectáculo único.
En la costa catalana, Casanova, de Andrés Torres en Sant Martí Sarroca, y Citrus del Tancat, dirigido por Aitor López en Alcanar, destacan por su enfoque en la tradición mediterránea. Sus menús, accesibles y profundamente arraigados en la cultura local, se convierten en una visita obligada para quienes buscan la esencia catalana con un toque renovado. Más al norte, en Portbou, Voramar ofrece una experiencia marinera que explora los sabores de la Costa Brava bajo la dirección de Guillem Gavilán y Pau Jamás.
Por último, en Sardas, Huesca, Toño Rodríguez deslumbra con La Era de los Nogales, una oda a las recetas aragonesas tradicionales reinterpretadas con un enfoque moderno. Sus tres menús degustación, cada uno más largo que el anterior, se sitúan entre los 38 y 68 euros, capturan la esencia del Pirineo con un toque de sofisticación que lo convierte en un destino imprescindible.
La región central de España ha sido testigo del auge de propuestas gastronómicas que combinan tradición y vanguardia, destacando tanto en grandes capitales como en localidades más pequeñas. Este año, varios restaurantes han alcanzado la distinción de su primera estrella Michelin, convirtiéndose en referentes de la creatividad y la técnica culinaria.
En Cuenca, Casas Colgadas Restaurante, liderado por Jesús Segura, destaca no solo por su ubicación en las icónicas casas colgadas de la ciudad, sino también por su reinterpretación de la cocina manchega. Este enclave histórico se convierte en el escenario ideal para un menú degustación de 15 magníficos pases que, por unos 95 euros, celebra la riqueza de los ingredientes locales con un enfoque contemporáneo.
En Madrid, el dinamismo gastronómico es palpable con tres nuevos restaurantes que logran la ansiada estrella. Chispa Bistró, de Juan D’Onofrio, aporta un toque desenfadado y moderno a la escena culinaria de la capital, con cocina a la carta y un menú degustación de 120€ llamado Fuego Loco. Pabú, bajo la dirección de Ignacio Montes, ofrece una experiencia sofisticada que trabaja el concepto de las microtemporadas, utilizando alimentos e ingredientes de mar y campo. Sus menús degustación en la actualidad cuestan 150 y 130 euros, con opción de pedir a la carta. Por otro lado, Sen Omakase, liderado por Steven Wu, revoluciona la oferta de alta cocina japonesa en Madrid, con una propuesta que combina la precisión técnica del sushi con ingredientes locales y japoneses de primera calidad, y un estilo de cocina kaiseki. Su menú omakase consta de 35/40 bocados por unos 220€.
El toque personal y local lo aporta La Casa de Manolo Franco, en Valdemorillo, donde el chef Manuel Franco reivindica la tradición culinaria de la zona con un enfoque innovador que conecta el pasado y el presente en cada plato. Este restaurante ofrece un menú degustación llamado Cerrar los ojos, cuya versión más sencilla cuesta en torno a los 85 euros, y pone en valor los productos de proximidad. También está disponible en versión XL y versión cena.
En la localidad de Tomelloso, Rubén Sánchez Camacho lleva la cocina manchega a un nuevo nivel con Epílogo. Este restaurante, que aúna tradición y creatividad, presenta platos que destacan por su complejidad y elegancia, con dos menú degustación disponibles por 55 euros y 76 euros. Mientras tanto, en la capital, Gofio, de Safe Cruz, celebra la cocina canaria con una propuesta innovadora que traslada los sabores del archipiélago al corazón de Madrid. Su menú express ronda los 100 euros, combinando ingredientes únicos con técnicas de alta cocina. Sus menús Canariedad Máxima, y Canariedad Máxima Plus cuestan 125 y 185 euros.
Finalmente, VelascoAbellá, dirigido por Óscar Velasco y Montse Abellá en Madrid, se suman a esta lista con una propuesta de alta gastronomía que pone el foco en la técnica y el sabor. Con un ambiente elegante en el que nos abren las puertas casi de su casa, y una carta que destaca por su innovación, este restaurante ofrece menús degustación por 116 euros, aunque también ofrece carta para elegir los platos.
El centro de España se reafirma como un núcleo de experimentación y excelencia culinaria, donde tanto las tradiciones locales como las influencias internacionales se entrelazan para dar lugar a experiencias inolvidables. Esta diversidad de propuestas consolida a la región como un destino imprescindible para los amantes de la alta gastronomía.
En las regiones del Levante y el sur de España, la gastronomía evoluciona constantemente, destacando la riqueza de los productos locales, desde los pescados y mariscos del Mediterráneo hasta los sabores intensos del interior andaluz. Los nuevos restaurantes que han recibido su primera estrella Michelin en estas zonas combinan innovación y tradición, ofreciendo experiencias únicas que ponen en valor su patrimonio culinario.
En Málaga, Blossom, liderado por Emi Schobert, presenta una cocina sofisticada que reinterpreta los sabores de la región y distintas técnicas culinarias. Su menú degustación Grand Blossom, con un precio de 125 euros, y dos versiones diferentes, para la comida y la cena utiliza ingredientes locales y técnicas modernas para sorprender a los comensales con una propuesta elegante y sensorial.
En Murcia, Frases, de Marco Antonio Iniesta, lleva la cocina de mercado a nuevas alturas, en este caso literarias. Este restaurante combina creatividad y arraigo local en cada plato, con un enfoque que resalta la frescura de los productos del entorno murciano. El menú degustación, por unos 85 euros, destaca por su originalidad y ejecución técnica, situando a Murcia como un punto clave en el mapa de la gastronomía nacional.
En el interior de Andalucía, Pedro Aguilera ha logrado convertir a Mesón Sabor Andaluz, en Alcalá del Valle, Cádiz, en un referente de la cocina tradicional reinterpretada. Con dos menús degustación que van de los 76 (9 salados y 2 dulces) a los 94 euros (12 salados y 3 dulces), Aguilera pone en escena los ingredientes andaluces en platos que evocan tanto la historia como la innovación. Este espacio destaca por su compromiso con la sostenibilidad y el producto local.
En la Comunidad Valenciana, Origen, bajo la dirección de Álex Vidal en Carcaixent, ofrece una propuesta que celebra los sabores mediterráneos en su esencia más pura, poniendo el acento en los productos de temporada, ecológicos y de comercio justo. Con un menú degustación que oscila entre los 58 y 75 euros, el chef transforma productos de la huerta y del mar en platos que exaltan la riqueza cultural y gastronómica de la región.
Estas nuevas estrellas Michelin en Levante y el sur reflejan una cocina en plena evolución, que no renuncia a sus raíces mientras explora nuevas fronteras creativas. Desde la tradición andaluza hasta la frescura mediterránea, estas propuestas destacan por su diversidad y excelencia, convirtiendo a estas regiones en paradas obligadas para los amantes de la buena mesa.
Las Islas Canarias han demostrado una vez más su capacidad para cautivar a los amantes de la gastronomía con una oferta que mezcla sabores autóctonos e influencias internacionales. Este año, cuatro restaurantes han conseguido su primera estrella Michelin, reafirmando el crecimiento y la consolidación de la alta cocina en el archipiélago.
En Adeje, Tenerife, Donaire, liderado por Jesús Camacho, ofrece una propuesta que reinterpreta los sabores tradicionales canarios con técnicas modernas y en el que la experiencia no es solo un festín para el paladar, sino también para la vista. Ubicado en un entorno privilegiado, el restaurante combina vistas espectaculares con un menú degustación en el que se asocian elementos musicales y teatrales a las tres etapas de su menú degustación, que cuesta 100 euros, destacando por su equilibrio entre la tradición y la creatividad.
También en Adeje, Il Bocconcino by Royal Hideaway, dirigido por Nikki Pavanelli, se presenta como un homenaje a la cocina italiana con toques locales y contemporáneos, con detalles del estilo del propio chef. Este restaurante destaca por su elegancia y su meticulosa selección de ingredientes, ofreciendo un menú degustación de 115 euros que fusiona lo mejor de ambas culturas culinarias.
En Playa Blanca, Lanzarote, Kamezí brilla bajo la dirección de Rubén Cuesta, quien combina la riqueza de los productos locales con un enfoque técnico impecable. Su menú degustación, que vale 105 euros, es un reflejo de la biodiversidad de la isla, integrando ingredientes de origen volcánico en platos de alta complejidad.
Por último, en Las Palmas de Gran Canaria, Muxgo, de Borja Marrero, lleva la cocina de kilómetro cero a un nuevo nivel. Este restaurante apuesta por la sostenibilidad y el respeto por el entorno, utilizando productos locales como base de su innovador menú degustación, cuyo precio se sitúa en torno a los 87 euros, con otra opción algo más sofisticada por 100 euros. Marrero destaca por su capacidad de narrar historias a través de cada plato, conectando a los comensales con la esencia de las islas.
La gastronomía canaria, marcada por su singularidad geográfica y cultural, sigue conquistando la escena internacional. Los restaurantes reconocidos este año reflejan un compromiso con la excelencia y la innovación, llevando los sabores del Atlántico a nuevas fronteras y consolidando al archipiélago como un destino de alta gastronomía imprescindible.
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