La receta para hacer una tarta de queso en 15 minutos

  • Hay dos tipos de tarta de queso: las que se preparan al horno y las que no, siendo estas mucho más rápidas

  • No necesitarás ni siquiera hornearla, con meterla en la nevera basta y te quedará deliciosa

  • Un clásico que gusta a todo el mundo y que puede ser la protagonista de cualquier reunión

Uno de los postres más conocidos en todo el mundo es la tarta de queso. Un dulce que no deja de conquistar paladares de miles de personas y corazones de quien se mete en la cocina para su preparación. A grandes rasgos, existen dos tipos de tartas de queso, las que necesitan de horno y las que no. 

Es un postre sencillo, con ingredientes básicos y que da un resultado bueno y pintón. Hay miles de recetas según el tipo de tarta y la técnica que se utilice para prepararla. Se puede hornear, meter en la nevera, poner un tipo u otro de galletas, utilizar queso crema o incluso queso azul, las posibilidades son infinitas. 

Si todavía no tienes la receta definitiva para hacer la tarta de queso más fácil y rápida, toma nota de la lista de ingredientes que vas a necesitar para que quede perfecta, sin horno y en 15 minutos. Se prepara con una base de galletas y mantequilla, después necesitarás ingredientes como nata líquida, queso crema, leche, cuajada y azúcar. Por último, necesitarás mermelada para cubrir la tarta, si puedes utilizar una mermelada casera de tu fruta favorita, mucho mejor.

Receta de tarta de queso 

Ingredientes

  • 200 g de galletas María
  • 80 g de mantequilla
  • 150 ml de nata líquida
  • 1 vaso de leche
  • 500 g de queso crema
  • 125 g de azúcar
  • 2 sobres de cuajada
  • Mermelada de frutas

Paso a paso 

  1. Tritura las galletas para preparar la masa
  2. Si quieres hacerlo de la manera más rápida y sencilla, introdúcelas en una bolsa de plástico con cierre de zip, ciérrala y pasa un rodillo de pastelería por encima hasta que tengas una especie de polvo de galleta
  3. Derrite la mantequilla y reserva
  4. Vierte las galletas en un cuenco grande, agrega la mantequilla fundida, y mezcla con ayuda de una cuchara hasta obtener una masa homogénea que será la base de tu tarta
  5. Coloca la masa en un molde redondo de manera que quede bien repartida por la base
  6. Para ello presiona la masa de modo que quede bien adherida al molde
  7. Déjala enfriar 10 minutos en la nevera mientras haces la mezcla de la tarta
  8. Mezcla en un cazo la leche junto con la nata y el queso crema y ponlos a calentar
  9. Cuando los tres ingredientes queden bien integrados, agrega el azúcar y remueve hasta que se haya fundido con la mezcla anterior
  10. Agrega los sobres de cuajada, remueve y retira del fuego
  11. Saca el molde de la tarta de la nevera y vierte encima de la base de galletas la preparación anterior
  12. Hazlo cuidadosamente para no agujerear la masa
  13. Enfría la tarta al menos 6 horas en el frigorífico hasta que quede bien cuajada y así evites que se desmorone cuando la cortes al servirla
  14. En el momento de servir, cubre la tarta con tu mermelada favorita y decórala con un poco de fruta fresca y unas hojitas de menta

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