Claudia Schiffer es una de las grandes supermodelos que triunfó en los años 90, pero tres décadas después su carrera profesional no está vinculada únicamente al mundo de la moda. Además de publicar libros y hacer su trabajo benéfico como embajadora de Unicef, también ha estado ocupada con diferentes colaboraciones con marcas. Una de ellas está relacionada con el mundo de la cocina, ya que ha diseñado una vajilla junto a Vista Alegre y Bordallo Pinheiro, lo cual le ha dado pie a hablar sobre su experiencia gastronómica.
La alemana recuerda en una entrevista con Elle Gourmet que sus padres solían organizar muchas comidas en casa: “Yo también recibía a muchos amigos cuando era niña y lo sigo haciendo. Por desgracia, no heredé el talento de mi madre para la cocina, aunque puedo copiar algunos de sus platos”. Para la modelo, la cena perfecta es en su hogar, acompañada de amigos íntimos, y cuidando la decoración, ya que le gusta encender velas y poner flores frescas en los jarrones.
Sin embargo, no prepara un menú convencional para cenar, sino que se decanta por un bufé libre. Schiffer destaca que esta opción permite que “cada uno se sirva lo que quiera”, de manera que cada invitado puede elegir (y repetir) sus platos favoritos. Además de colocar la comida en platos, cuencos y bandejas en su cocina, ofrece a los comensales un vino acorde a la ocasión, postre y café o té.
La supermodelo afirma que, a la hora de organizar una cena en su casa para sus amigos, su bufé preferido es el italiano. Los alimentos e ingredientes que menciona en primer lugar son la burrata, los tomates, el aceite de oliva y el vinagre. Su bufé incluye varios productos clásicos de la gastronomía de Italia, como focaccia recién hecha, milanesa de pollo, risotto de setas, espaguetis al pomodoro, ensalada verde, salchichas curadas italianas y jamón de Parma con pepinillos.
Schiffer elige un vino italiano para acompañar todos estos platos y revela que su favorito es Sassicaia. Los expertos de Vinoselección exponen que se trata de “un tinto con la elegancia como principal característica, con una magnífica acidez, taninos sedosos e intenso bouquet”. Esta variedad envejece durante 24 meses en barricas de roble francés y otros seis meses más en botella antes de ponerse a la venta. Por otra parte, el postre que la anfitriona ofrece en su casa es el tiramisú y, para terminar, los invitados pueden elegir entre tomar un café expreso o un té a la menta.
Claudia Schiffer comparte que su primer recuerdo en la cocina tiene que ver con los espaguetis a la boloñesa. Su madre la llevó al médico y comentó que comía muy poco, ante lo cual el doctor le preguntó qué productos le gustaban. “Mi madre contestó que pasta con carne y tomate. ‘Pues hágale espaguetis a la boloñesa todos los días’, le aconsejó de forma pragmática”, relata la entrevistada. La supermodelo incide en que este plato de su niñez sigue siendo uno de sus favoritos y también le gusta a sus hijos. Además, explica con qué ingredientes lo prepara: tomates ciruela ecológicos, picada de ternera, cebolla, apio, ajo, vino tinto y un chorrito de ketchup.
Claudia Schiffer vive en una mansión en Inglaterra con su marido, el director de cine Matthew Vaughn, pero nació en Rheinberg, una localidad de Alemania. Ella confiesa en la misma entrevista que echa de menos muchas de las recetas tradicionales con las que creció en su país de origen. Cita el schnitzel (un tipo de filete empanado) con patatas fritas, el arenque con nata agria y patatas, los espárragos blancos con jamón, las patatas con salsa de mantequilla y chucrut, las tortitas con salsa de manzana, las albóndigas de levadura, las salchichas al curri y también un tipo de galleta o bollo salado muy popular: los pretzels grandes recién horneados.
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