El autocontrol: entrenando la fuerza de voluntad
El problema no es ceder ante una tentación en un momento concreto sino que debemos observar si la mayoría de nuestras decisiones están gobernadas por los impulsos y recompensas del corto plazo
La fuerza de voluntad es como un músculo, se puede entrenar para hacerlo más fuerte, pero también se cansa con cada decisión que tomamos en nuestro día a día
Debemos fortalecer nuestra voluntad y mantenernos firmes cuando las cosas se ponen incómodas
Nuestra vida y el mundo están llenos de tentaciones y mantener el autocontrol es una habilidad difícil de adquirir. Depende en gran medida de la fuerza de voluntad, esta escurridiza habilidad de elegir lo mejor para nosotros y no lo más placentero o inmediato”
Hoy en Enphorma Psicología, de la mano de Sergio Fernández, aprenderemos a entrenar y desarrollar nuestra fuerza de voluntad: ¿qué pautas podemos seguir para controlar nuestros impulsos, resistir a las tentaciones y ser más conscientes de nuestras acciones?
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La fuerza de voluntad es la clave para tomar control de tus pensamientos, impulsos y sensaciones, pero sobre todo, para controlar tu propia vida y dirigirla donde quieres.
“El autocontrol es la capacidad de dominar los impulsos del momento para actuar según tus valores y objetivos a largo plazo” Emilio Valcárcel
La capacidad de autocontrol es el factor más determinante para alcanzar el bienestar y el éxito en la vida, por encima incluso de la inteligencia.
El motivo es que cuando tienes autocontrol, tienes más capacidad para manejar el impulso del momento, para manejar la situación antes de actuar y poder hacer lo correcto. Y claro, cuando consigues hacer esto una y otra vez a lo largo de tu vida, aunque alguna vez te equivoques, vas a tener muchas más posibilidades de sentirte bien y tener éxito.
¿De qué depende la capacidad de autocontrol?
El autocontrol depende en gran medida de lo entrenada que tengas tu fuerza de voluntad, pero también de cómo nos sintamos a nivel físico y mental en ese momento, así como del contexto en el que nos encontremos.
Lo primero que debemos entender es que la fuerza de voluntad es como un músculo que cual se puede entrenar para hacerlo más fuerte, pero que también se agota, en concreto, se cansa con cada decisión que tomamos en nuestro día a día, por lo tanto conviene guardar la energía para las decisiones verdaderamente importantes.
El problema no es ceder ante una tentación en un momento concreto, todos tenemos derecho a darnos algún capricho. El problema viene cuando la mayoría de nuestras decisiones están gobernadas por los impulsos del momento y las recompensas del corto plazo.
¿Qué podemos hacer para fortalecer el autocontrol y recargarlo a diario?
Vamos a ver 5 claves prácticas:
- Define tus objetivos y valores, así podrás saber qué decisiones tomar en base a ellos. Pregúntate quién eres, quién quieres ser y qué vas a hacer para conseguirlo.
- Entrena tu fuerza de voluntad construyendo hábitos porque son como la proteína de los músculos, cuantos más hábitos saludables consigas instaurar en tu vida, más se fortalecerá tu voluntad. Empieza por cosas muy sencillas, sólo uno a la vez y durante 21 días, o los que necesites para que ya no te cueste.
- Cuida tu estado físico y mental aprovechando que tienes que entrenar creando hábitos y proponte algunos encaminados a mejorar tu estado físico y mental. Empieza por lo más básico y placentero: descansar, hidratarte, estirar, alimentarte mejor, practicar el mindfulness, caminar 10.000 pasos al día. Ojo, ten en cuenta que cuando estamos cansados, bajo los efectos del alcohol, con demasiado estrés, o demasiada hambre, nuestro autocontrol se relaja y aumenta enormemente la posibilidad de ceder a los impulsos.
- Póntelo fácil, aleja las tentaciones. Crea rutinas automatizadas que no te obliguen a tomar decisiones irrelevantes todo el tiempo. Por ejemplo, automatiza la lista de la compra, planifica tu agenda la noche antes, prepara tus comidas para toda la semana. Elimina de tu entorno todos los estímulos y personas negativas, aleja las tentaciones, por ejemplo, si tienes un problema con el chocolate no lo tengas en la despensa o la nevera.
- Acepta y surfea el impulso. Cuando aparece la tentación hay un impulso real con el que necesitamos lidiar, el cerebro genera la hormona del placer que activa los centros de recompensa liberando otras sustancias que nos generan ansiedad y nos empujan a caer en la tentación. En estas situaciones es difícil pensar en lo que nos conviene, así que lo que vamos a hacer es aceptar ese impulso, esa emoción o pensamiento y surfearlo: imagina que es una ola que viene hacia nosotros y que pasará rápidamente, podemos dejar que nos arrastre o subirnos a la ola sabiendo que en unos instantes pasará. Intentar deshacernos o negar este tipo de impulsos es peor aún. Acepta y suelta. Esta técnica te enseña a tolerar la incomodidad física de querer algo, confía en que si respiras tranquilamente durante unos segundos… pasará.
Resumen de ideas
- El autocontrol es la clave del bienestar y el éxito en la vida.
- Depende en gran medida de lo entrenada que tengas tu fuerza de voluntad, de cómo te sientas a nivel físico y mental en ese momento y del contexto en el que te encuentres.
- La fuerza de voluntad es como un músculo, se puede entrenar pero también se cansa y se agota.
- La mejor estrategia para lidiar con los impulsos o tentaciones, es aceptar esas sensaciones sabiendo que pasarán.