Cuando Rocío Jurado se enteró de que padecía un cáncer de páncreas, la artista no dudó en hacer todo lo que estuviera en su mano para superar la enfermedad. Por ello, decidió marcharse a Houston en varias ocasiones para poder llevar a cabo el tratamiento adecuado.
Pero, ¿quién decidió que se fuera a Houston? Rocío Carrasco asegura que fue una decisión que ella misma tomó, pero que hubo alguien que le animó a hacerlo. “Estaba operada de muy pocos días. A ella le habían puesto una habitación que estaba al lado de la UCI. Tenía un mostrador con todas las vírgenes y los rosarios. Llegaban todos los días muestras de cariño de todo el mundo”, comenzaba.
Emocionada, la hija de ‘la más grande’ recordaba la escena: “Yo estaba sentada con ella en la cama, ella estaba tumbada. Entonces Fidel entra y le dice que tiene lo que tiene, que ya sabemos lo que es. Que se hiciera a la idea de que delante tenía a un león y solo una bala. ‘Si la usas tiene que ser para matarlo, si no te come”.
Fue entonces cuando el marido de Rocío Carrasco aconsejó a su suegra: “Para matar al león, creo que lo mejor es Houston”. Ella se quedó mirándole y le dijo que ella también creía que era lo mejor.
Después de mantener esa conversación con su hija y su yerno, hizo pasar a José Ortega Cano: “José se opuso a esa decisión que se había tomado y a ella en ese momento le dio exactamente igual. Dijo que ella se iba a Houston”.