Los vecinos de Todoque, en La Palma, están acercándose a sus viviendas para recuperar sus enseres antes de que la lava del volcán de Cumbre Vieja llegue a sus casas y lo arrase todo a su paso. En 'El programa de Ana Rosa' hablamos con uno de los afectados, Fernando, cuyo hogar sigue en pie pero rodeado de lava.
En directo, Fernando nos muestra desde la distancia el lugar donde se encuentra su casa y comenta que se encuentra "bien". El domingo fue desalojado "con lo puesto, bajo la lluvia de ceniza del volcán, el cráter estaba aún más cerca que ahora". Con la voz quebrada confiesa que "lo dejamos todo para salvar la vida".
Fernando se enteró a través de la televisión de que el volcán había explotado, "nadie nos avisó de que era inminente la evacuación". Su casa está al lado de uno de los cráteres del volcán y no puede acercarse a recoger nada de sus pertenencias personales, "nos están diciendo que nadie se arriesgue para recoger nada".
El vecino afectado por el volcán no sabe qué ocurrirá con su casa, "por ahora yo la veo en pie, me imagino que a lo largo de toda la erupción terminará destruyéndose". Fernando a punto de llorar, cuenta que no puede mirar hacia su casa "me hiere mucho, no puedo, imposible". En esa vivienda se encuentran los recuerdos de toda su vida, "es la casa de mis antepasados. Están mis recuerdos, mis lugares por donde niño jugaba, por donde paseaba, toda una vida ahí, en ese lugar".
Fernando asegura que la casa se encuentra asegurada, pero hasta que no termine de soltar lava el volcán y puedan ver si el terreno es construible no puede saber nada, "es vivir hoy, ver como amanece cada día, por la noche lo último que hago antes de acostarme es mirar hacia el volcán y ver".