'El programa de Ana Rosa' emitió en directo la salida de Beatriz Flamini de la cueva tras permanecer en el interiorde ésta un total de 500 días. La alpinista pasó año y medio a oscuras, sin contacto físico con personas y sin poder darse una simple ducha. Al salir al exterior, la protagonista se rompió, le temblaban hasta las manos y se fundió en abrazos con sus seres queridos.
La salida de Beatriz Flamini de la cueva comenzó con un aplauso general de todas las personas que allí estaban presentes. Luego, poco a poco, empezó su adaptación al sol. La alpinista se quitó sus gafas para recibir esos primeros rayos de luz después de pasar 500 días a oscuras; tras esto, y visiblemente emocionada, se abrazó con cada una de las personas que le han ayudado en este importante proceso. Eso sí, la protagonista no perdió el sentido del humor y ya propuso un plan para su primer día en la civilización: "¿Quién va a pagar las cervezas?".
La escaladora, una vez ya asentada en el mundo exterior, quiso dar las gracias mientras le agarraban dos compañeros: "Quiero daros las gracias, ahora me tienen sostenida porque tras estar ahí dentro un año y medio... ya os contaré".
Luego, Beatriz Flamini, mientras se ayudaba de sus compañeros, continuaba diciendo: "Me gustaría ser amable, poder deciros, poder contestaros...". Sin embargo, la escaladora confiesa su cansancio y pide poder emplazar sus palabras a la rueda de prensa: "Si me permitís que me pueda pegar una ducha, llevo un año y medio sin tocar el agua".
Por último, le preguntan sobre cómo calificaría esta experiencia en la cueva de Motril y Beatriz Flamini se emociona al contestar: "Excelente e insuperable, no solo depende de mí, de toda esta 'gentaza' que hay aquí, de estos profesionales que sin ellos esto no, entre todos...".