Desde que se ha separado de Ana María Aldón, Ortega Cano parece que está viviendo una segunda juventud protagonizada por el baile y el cante. 'El Programa de Ana Rosa' enseña, cómo el torero lo dio todo en La Parroquia de San Antón, hasta se subió al escenario para cantar una de sus rancheras favoritas.
Anoche, Ortega Cano, no quiso perderse el concierto que se celebra anualmente en la parroquia de San Antón. Al llegar, no dudó en ganarse la simpatía de todas las mujeres que estaban allí: "¡Qué de mujeres guapas!, ¡Qué arte!". Ellas respondían con risas y él tiraba besos y ocupaba su asiento. Acompañado por Marina y la diseñadora Marily Coll, el torero disfrutó de la actuación, animando con palmas, ayudando con los coros, bailando y ovacionando al finalizar cada tema.
La cantante Glenda Gaby agradeció la presencia del torero: "Gracias por estar conmigo esta tarde, sabe que se lo agradezco de corazón. ¿Vamos a sorprender, verdad maestro?". A lo que él, con una sonrisa e ilusionado por la situación, le responde: "Claro". La cantante, al rato, se dirige a él: "Maestro, a ver si cantamos algo...".
Ortega Cano se quitó las gafas y no dudó en subir al escenario. Al principio un poco tímido pero sonó una de sus rancheras favoritas y cantó a todo pulmón "Sigo siendo el Rey". Se llevó una gran ovación y lo agradeció a lo torero, con el típico gesto que él solía hacer. A la salida se encontró con la prensa y los reporteros preguntan: "¿Le desea todo lo mejor, ¿no?", refiriéndose a su exmujer, sin muchas ganas responde a la pregunta: "Por supuesto, gracias. Sí, sí".