Ángel Cristo ha explicado detalladamente en ‘¡De viernes!’ cómo afrontó su dura adolescencia en un ambiente familiar en el que esperaban que él ‘’fuese el hombre de la casa’’ y ha desvelado todo sobre los problemas de Bárbara Rey con el juego.
‘’Mi madre necesitaba dinero para pagar a la gente a la cual al final acababa pagando yo o dinero para ir al casino o para pagar a algún prestamista. Yo empecé con mi madre a ir al casino con 17 años hasta que me pillaban que no tenía y me pedían que abandonase el casino’’, comienza explicando.
‘’Al principio no eres consciente del problema que tiene, es verdad que el casino nos dio de comer en la época de las pesetas. Al principio se controlaba un poquito y ganaba, pero eso se acabó rápido’’.
Ángel Cristo desvela que su madre le mandaba a pedir dinero: ‘’Estaba la parte en la que ella necesitaba dinero y había que pedirlo prestado. Al final era yo el que iba a los baños del casino a coger el dinero que le daban los prestamistas para que no la vieran a ella cogerlo. Como yo cogía ese dinero siempre, cuando mi madre no pagaba a quien se lo pedían era a mí’’.
‘’Cuando venían a mi casa los fines de semana a ajustar cuentas con mi madre, no quería salir, no quería abrirles la puerta y no es que estuviera durmiendo, es que me pedía que yo les atendiera y que diera la cara. A unos prestamistas peligrosos, la actitud con la que venían a casa no era amistosa’’, explica el hijo de Bárbara Rey.
‘’La he visto gastarse mucho dinero en el casino: desde 100 a 30.000 euros en una noche”, declara, afirmado así la adicción de su madre al juego y explica que, aunque entrase mucho dinero en casa, ‘’nunca era suficiente’’.