Nagore y Jesús confiesan sus retoques estéticos y abren un debate: ¿vernos más guapos nos motiva a entrenar?

A menudo, priorizamos la estética a la salud. Gustarnos a nosotros mismos y a los demás nos hace sentirnos guapos, por eso tendemos a pensar que entrenar es el camino para tener una buena imagen, pero en ‘El Método Vázquez by Fitbit’ van más allá y, en este cuarto episodio, plantean la siguiente cuestión: ¿Es verse más guapo/a una buena motivación para hacer deporte?

Para profundizar en el tema, el espacio ha contado en esta ocasión con dos invitados de excepción. Por un lado, Nagore Robles ha compartido su experiencia con el deporte y, por otro, el deportista de élite y entrenador Martín Giacchetta ha dado su opinión de experto, analizando cómo puede llegar a afectar la motivación en el deporte.

Nagore Robles siempre ha practicado deporte porque, desde que era pequeña, sentía que la actividad física le sentaba muy bien y le reconducía, y eso le animaba a no abandonar esta rutina tan saludable. A día de hoy, se siente feliz de poder afirmar que se siente muy guapa, y también muy a gusto consigo misma.

Que su parte interior y exterior estén bien es maravilloso, aunque reconoce que esto es el resultado de mucho trabajo de autoestima, de autocuidado y de seguir ciertas rutinas: “Me levanto, reviso en mi Fitbit cómo he descansado y me pongo a pensar en el día. Después hago de hora y media a dos horas de yoga y meditación, que es mi brújula y me viene muy bien, y luego me preparo un súper desayuno de vikinga”.

Si Jesús ha planteado el debate de cómo los filtros de belleza del móvil pueden afectar al autoestima si se convierten en una obsesión por verse bien, defiende que también existe una tecnología que nos ayuda a estar bien por dentro: la de Fitbit, a la que Nagore es adicta desde hace tiempo.

La presentadora usa su Fitbit absolutamente para todo: para monitorizar su descanso, o para hacer deporte y registrar tanto el ejercicio físico como el tiempo de actividad, las calorías quemadas o las zonas de ritmo cardiaco.

Pero ahora, al igual que Jesús con su marido, también lo usa para picarse con Sandra y con sus amigas. En la app de Fitbit puedes retar a tu familia y amigos a desafíos de pasos para que moverte sea más divertido. ¡Todo un descubrimiento!

Durante la charla, también han tenido tiempo de hablar de retoques estéticos. A la pregunta de Jesús sobre si se había hecho alguno, Nagore ha contestado muy sincera: “Todos los que pueda… ¡y los que me quedan!”. Jesús ha reconocido que, aunque él no ha pasado por quirófano, sí que ha recurrido a algún tratamiento de belleza menos invasivo para verse bien.

Así que, como conclusión en torno al mito, en esta primera parte de ‘El método Vázquez by Fitbit’, Nagore tiene muy claro que, aunque querer sentirse guapo/a puede ser una motivación para comenzar a practicar deporte, lo más importante es que te ayude a sentirte mejor contigo mismo y reconducirte. Y gracias a un smartwacth avanzado en salud como Fitbit Sense, puedes tener un entrenador en la muñeca que te motiva de forma positiva, animándote a mejorar cada día.

La de Martín Giacchetta. Hace unos años, mientras hacía una ruta en bici para la grabación de un documental junto a Dani Rovira, un coche le atropelló y, aunque en teoría no le ocurrió nada grave, después de unos meses sintiéndose raro, un día todo cambió.

El golpe durante el accidente le produjo un edema cerebral que se manifestó con una crisis epiléptica, provocándole una triple fractura craneal por el que le indujeron un coma. Esta experiencia le enseñó mucho sobre la vida a este deportista de élite y entrenador profesional. Desde entonces, Martín sigue un mantra que es su motivación: “Quiero llegar muy vivo al día de mi muerte, ese es mi reto a partir de ahora”.

Antes del accidente, Martín era muy exigente marcándose retos deportivos: ha atravesado el estrecho de Gibraltar a nado, ha cruzado los Andes corriendo y ha completado una gran cantidad de triatlones. Ahora reconoce que competir a ese nivel puede hacer daño, ya que someter al cuerpo a ese trabajo extremo puede ser perjudicial.

Por eso, a la hora de hablar del mito sobre bienestar que hoy se plantea en ‘El método Vázquez by Fitbit’, lo tiene claro: “Hace más de 20 años que soy entrenador, y la gente que viene siempre lo hace por un motivo estético. Es muy difícil que vengan por salud, salvo cuando un médico les manda a cuidarse”. Por eso, aunque no ve mal que el aspecto físico pueda funcionar como motivación, lo ideal sería modificar ese mito para que empecemos a entrenar por salud: empezar a vernos bien por dentro para luego vernos también muy bien por fuera.

Martín Giacchetta lleva años caminando de la mano de Fitbit, una marca con la que comparte objetivos ya que ambos tienen como filosofía hacer del mundo un lugar más sano.

Tal y como reconoce Martín, incluso a él, deportista de élite que dedica su vida a entrenar, ha habido momentos en los que, por atender otras prioridades de su vida, sin darse cuenta dejaba de ser activo. Y ha sido ahí cuando Fitbit le ha echado una mano, recordándole que tenía que realizar alguna actividad: “Detecta cuando pasas demasiado tiempo sin levantarte de una silla y te manda mensajes que te motivan a moverte para romper el sedentarismo”.

“El mundo es un gimnasio cuando uno se lo toma como tal”, asegura Martín, que nos recuerda que podemos ver una serie pedaleando, o hablar por teléfono mientras caminamos para tener una vida activa.

Pero la conclusión de este nuevo episodio de ‘El Método Vázquez by Fitbit’ ha quedado bastante clara: sentirse guapos por dentro hace que nos sintamos guapos por fuera. Si te sientes bien y te cuidas, te sientes agradecido/a con tu cuerpo por todo lo que te permite hacer y lo mantienes en forma, puedes estar más que satisfecho/a.

Y si además tienes un aliado como Fitbit Sense, que te ayuda a conseguir los desafíos que te propone, cada vez tendrás más claro que empezar a cuidarse para sentirse bien por dentro ayuda a sentirse mejor por fuera. Porque ya es hora de conectar con tu salud.