Los agentes de la ‘Brigada Costa del Sol’ siguen la pista a Capitano, un hombre que utiliza niños para el desembarco de hachís en la península. Sin embargo, no será un cargamento lo que les llevará ponerle contra las cuerdas. Capitano ha raptado a la hija de uno de los principales narcotraficantes magrebís y necesita dinero para pagar su dote. Mientras tanto, Bruno juega a ser el novio de la Buhita con su mujer ya en Torremolinos y tendrá que enfrentarse con la realidad: los Peña también le buscan a él.
¡Stop Spoiler! A partir de aquí te vamos a destripar el capítulo 5 de ‘Brigada Costa del Sol’ así que si no lo has visto, es el momento de dejar de leer.
Tras recibir el aviso de la propietaria que le había alquilado el chalet, los agentes dan con Capitano, el camello que descarga hachís en las playas. Sin embargo, en su casa no encontraran droga, se encontraran con una mujer marroquí encerrada. Se trataba de su esposa, quién salió de su país sin el permiso de su familia.
Bruno deja en libertad a la esposa de Capitano al saber que no estaba secuestrada, pero había más gente en hacer daño al camello. Los hombres con los que él no quiso hacer tratos, secuestran a su esposa y le advierten que si no llegan a un acuerdo entregaran a la joven a su familia. Capitano se viene abajo y le cuenta al Hippie y a Terrón todo lo que sabe del negocio de la droga: quiénes son los narcos, cómo entra en las costas, cómo se distribuye…
Lucas está aprendiendo más rápido de lo que sus superiores esperaban y con la ayuda de las fotos del Hippie descubre el paradero de los hombres que han secuestrado a la esposa de Capitano. Con lo que Bruno no contaba era con tener que ir a detenerlos junto a Cifuentes, quién lleva todo el día bebiendo y vuelve a colocarle al borde de la muerte.
Al mismo tiempo que Bruno buscaba y detenida a los camellos que habían secuestrado a la esposa de Capitano, no paraba en su búsqueda incansable de los hermanos Peña. Le ha prometido a su Buhita que los va a encontrar y hará lo que sea para conseguirlo. Sin embargo, quiénes le han encontrado han sido ellos a él. Atilano sorprende a Bruno y a Charo mientras están comiendo en un chiringuito de la playa. Charo entra en pánico al tener de nuevo enfrente al hombre que le apuntó con un arma y Bruno no tiene más remedio que escuchar la nueva amenaza de Atilano Peña.
Charo ha comenzado a notar un poco raro a su marido y encontrar un pelo de mujer en el lavabo de su nueva casa, no hace más que confirmar sus sospechas. Sin embargo, intenta ser prudente y quiere creer que quién ha subido a una chica a su casa es Terron, el compañero de su marido.
El Buho le debía mucho dinero a un prestamista de la Carihuela quién no perdona lo que le deben y quiere quedarse con su barca. Yolanda pide ayuda a Marielena y Reyes para poderse quedar con lo único que le queda de su padre, pero estos se niegan asegurando atravesar un complicado momento económico. La Buhita necesita quedarse con la barca sea como sea y no duda en conseguir el dinero robando de la caja de su barra en el Camelot. Marielena no se fía de ella y la tiende una trampa, en la que ésta cae.