Carmen Sevilla falleció el pasado martes a los 92 años de edad en Madrid. La familia ha decidido que no haya una despedida pública de la artista y han optado por darle el último adiós en la más estricta intimidad.
Augusto Algueró, el hijo de Carmen Sevilla, ha sido criticado en las últimas horas por la decisión de no hacerle un homenaje público a su madre. A pesar de que no suele hablar ante los medios de comunicación, lo ha hecho para responder a quienes opinan sobre la decisión de la familia.
“Nunca he querido aparecer en la prensa porque o no soy famoso, los famosos era mis padres”, ha comenzado, añadiendo que prefiere permanecer en el anonimato.
“He escuchado por ahí a alguien que ha dicho que había venido [al tanatorio] y no había nadie. Pues lógicamente no había nadie porque no era el momento ni correspondía que hubiera nadie. Ahora mismo todos los que vamos a entrar, que somos muy poquitos, es única y exclusivamente familia de lazos de sangre con mi madre, con la excepción de dos personas, que son las que han cuidado a mi madre durante los últimos años”, ha explicado.
Estas palabras respondían a unas declaraciones que hizo ayer el exabogado y amigo de Carmen Sevilla, Marcos García Montes.
Mucha gente quiere despedirse de Carmen Sevilla, pero no será así, al menos por ahora. Augusto ha explicado que, a pesar de todo lo que se está diciendo, la decisión no ha sido solo suya: “No lo he decidido yo. Cuando falleció mi madre, me puse en contacto con los miembros de la familia y hemos decidido que preferíamos mantener una velada tranquilos y alejados de los medios”.
También ha dicho que comprende que haya a quien no le guste, pero que siempre hay críticas, sea cual sea la decisión que se tome: “Entiendo que las críticas siempre estarán, haga lo que haga siempre va a haber. Si hubiera montado un circo, una feria o una verbena, también hubiera habido”.