La vacuna de Astrazeneca está en el centro de la polémica. Varios países, entre ellos Dinamarca, Luxemburgo e Islandia, han dejado de administrarla porque podría provocar trombos, aunque aún no está demostrada esa correlación. El Ministerio de Sanidad y la ministra Darias insisten en que la vacuna es segura y que ya se ha administrado en España, sin provocar más que efectos secundarios leves.
El doctor Roi Piñeiro, jefe de pediatría del Hospital General de Villalba, ha lanzado un mensaje para tranquilizar a la población: “No hay ningún motivo de alarma, se forman tormentas muchas veces de la nada”. Según el experto, “es un error dejar de vacunar” ya que supone “perder un tiempo maravilloso” en la lucha contra el coronavirus.
“Se han registrado 30 casos en cinco millones de vacunados. Es un porcentaje bajísimo y no es diferente al de la población general que no recibe la vacuna”, explica Piñeiro.
El pasado jueves, la Unión Europea aprobó el uso de una cuarta vacuna contra el covid: la de Janssen, que solo requiere una dosis. Todavía no ha llegado a España (según las previsiones, lo hará en abril), pero en nuestro país ya se utilizan las vacunas de Pfizer, Moderna y Astrazeneca.