¿Un tipo arisco con problemas para relacionarse o un padrazo trabajador? El hermetismo rodea al círculo cercano de Tomás Gimeno, el hombre que ha desaparecido en Tenerife tras supuestamente secuestrar a sus dos hijas, y son dos los perfiles que sus amigos y la gente que le conocen describen de él.
Desde el sur de Tenerife, María Miñana, reportera del programa ‘En el punto de mira’, ha conectado en directo con ‘Ya es mediodía’ para contarnos la último hora sobre la investigación de las dos niñas desaparecidas y supuestamente secuestradas por su padre en la isla. La reportera le ha explicado a Sonsoles Ónega que les está siendo muy difícil acceder al círculo familiar de Tomás Gimeno y conseguir información sobre lo sucedido.
El hermetismo rodea al desaparecido y supuesto secuestrador, pero la reportera ha podido hablar con amigos íntimos de Tomás de su círculo de pádel. Un deporte que practicaba con asiduidad, casi de forma profesional y en el que ejercía de profesor. Según ha manifestado, los amigos de Tomy, como le llamaban, están absolutamente conmocionados porque aseguran que la relación de padre e hijas era estupenda y no pueden creer que las haya asesinado.
Los amigos del padre desaparecido tienen la sensación de que Tomás está escondido en algún sitio y que tarde o temprano aparecerá. Le definen como una persona “enérgica, impulsiva, muy trabajador un poco hippie, pero como padre, un padrazo”.
Tomás Gimeno proviene de una familia de clase media alta, que tenían empresas de agua que en la isla son muy conocidas. Además, tienen una finca platanera dónde él estaba trabajando en estos momentos. Se sabe que en el interior del coche han aparecido dos gomas de pelo de niña, un dibujo infantil, el envoltorio de una pastilla y de una chocolatina y una bebida.
Sus compañeros y amigos de pádel definen un perfil de hombre que poco o nada tiene que ver con la descripción del mismo que Dani Montero asegura que dan de Tomás Gimeno las personas que le conocen del barrio y del bar que frecuentaría, quiénes le ven como “Un tipo arisco, con problemas para relacionarse con la gente”. De hecho, meses atrás Beatriz, su pareja puso en conocimiento de la policía lo que estaba viviendo “Ella por los continuos insultos, habla de forma extraoficial con gente de la Guardia Civil, no pone la denuncia, pero sí les pone en conocimiento de lo que está viviendo”.