Los pediatras están alertando de que los menores de dos años no deben llevar mascarilla porque, de hacerlo, podrían sufrir asfixia. La Asociación española de Pediatría aconseja que hasta los dos años de edad los niños no las usen, y que entre los tres y los cinco años su uso sea voluntario aunque "recomendable".
Si el niño tiene seis años o más su uso es obligatorio pero existen pasos a seguir antes de utilizarla:
Por el contrario, si el niño visita espacios cerrados como supermercados, colegios o farmacias, su uso será obligatorio, al igual que si el menor tiene patologías previas o contacto con mayores de 60 años.
Por último cabe recordar que el uso de pantallas protectoras no sustituye a la mascarilla, y que en caso de utilizarla deberá limpiarse con agua y jabón y tener en cuenta que su uso prolongado podría causar problemas de visión.