Soledad Torrado es cuñada de Julia, una mujer de 48 años que ha fallecido tras haber dado positivo en coronavirus y llevar días reclamando telefónicamente una cita médica presencial.
Su marido y hermano de Soledad llamó hasta en tres ocasiones el día en que finalmente su mujer falleció. Al principio le dijeron que tomara Tranquimazin, medicación que tomaba para la depresión que sufría y aseguraban que los síntomas que sufría eran producto de los nervios.
Pero insistió y en la tercera llamada consiguió que acudieran: “Suplicó, tenía 39 de fiebre, estaba asfixiada, no podía hablar ni moverse de la cama, cunando quisieron llegar tras la tercera llamada la doctora dijo ‘pues sí parece que está mal”.
El equipo médico se fue tras llamar a la ambulancia que, al parecer, llegó solo con el conductor: “Mi hermano y mi sobrino, positivos en Covid, tuvieron que ayudar al chico de la camilla a trasladarla desde la cama… Mi cuñada no ha muerto de Covid, ha muerto porque la han dejado morir”.