La crema solar es el mejor aliado para el verano y totalmente necesaria para estar bien protegido de los peligros del sol, pero extender una capa pringosa sobre la piel no siempre resulta desagradable. Recientemente ha surgido una moda de congelar la crema para refrescarse, una práctica que desaconsejan que rotundamente los expertos.
'Ya es mediodía' ha hablado con Álvaro Fernández, farmacéutico, que nos ha confirmado que la crema congelada "pierde sus propiedades". "Puede afectar al nivel de protección porque al someterse a temperaturas extremas, esa crema se estropea. Lo ideal es mantenerla en un sitio fresco, pero no en la nevera", ha explicado.
La exposición prolongada a la radiación ultravioleta puede ocasiones distintas afecciones y enfermedades en la piel. Desde quemaduras, manchas y envejecimiento prematuro a cuestiones más graves como el cáncer de piel. Así, el uso de cremas y protectores solares es imprescindible en verano.
Así pues, congelar la crema solar quizá pueda servir para refrescar ligeramente la piel, pero no para protegerla. Por eso, si lo que se busca es combatir el calor, acaso sea mejor comprar un pulverizador y llenarlo de agua.