Sin poder dar crédito a la supuesta realidad de una relación de tres años que para ella había sido maravillosa, pero que al parecer era compartida, y al enfrentarse de golpe con un perfil de hombre totalmente opuesto a la persona de la que se había enamorado, Alba Carillo no quiere que Santi Burgoa engañe a ninguna otra mujer y ha intentado advertir a Vanesa Romero.
Así comienza la historia… Tras salir de Santi Burgoa con un portazo de narices, Alba Carrillo y B. novia no oficial del presentador, se ponen en contacto con Alexia Rivas, también rollete de Burgoa, para intentar localizar el teléfono de la actriz Vanesa Romero para contarle que ella también ha sido engañada y que mientras que Santi la seducía estaba emparejado con otra mujer.
“Le queríamos contar el escenario a Vanesa para que ella lo supiera…”, ha asegurado Alba Carrillo convencida de que el presentador ya se habría inventado una buena excusa que contarle. Sin embargo, ella tiene claro que “Este tipo de personas hay que descubrirlas porque me parecen peligrosísimas… Me dijo que se iba porque se había muerto el padre de un amigo y estaba de viaje con ella…”.
Alba está dispuesta a darle todos los detalles y evitar que siga engañada “Si ella me quiere llamar yo le cuento todas las cosas y le enseño las pruebas… yo de esto ya no quiero saber nada, pero me siento estafada y engañada”. Alba asegura no querer nada sentimentalmente del presentador, pero sentirse defraudada y con la sensación de querer una explicación ya que le consideraba parte de su familia “Le intenté llamar por la noche porque no me puedo creer que le haya dicho a B. todas esas barbaridades que me ha dicho que ha dicho… Yo no quiero nada con él, pero he estado tres años y medio con él y creo que me merezco una explicación. Que tenga la decencia de no dejar esto así de mal cerrado”.
Así se sentía Alba antes de saber que Santi Burgoa tenía varias relaciones paralelas y que le había estado engañando.